Durante décadas el perro colombiano estuvo escondido en el campo. Nuestros abuelos lo criaron y usaron para cazar. Pero nunca logró conquistar la ciudad y menos convertirse en un animal de compañía. Lea también: Diez razones para no darle concentrado a su perro.
Hoy una investigación de tres estudiantes de la Universidad Nacional, miembros del Grupo de Estudio de Genética Animal, confirma que Colombia tiene su propia raza de perro. Se trata del sabueso fino colombiano, un perro famoso entre los campesinos, expresidentes y amantes de la caza.
No se puede negar su parecido con los perros de raza Beagle y los sabuesos europeos traídos por españoles al país para atrapar patos. De allí heredó su habilidad para cazar, las orejas largas y pelo corto de varios colores.
El sabueso fino colombiano es un animal de carácter tranquilo, confiado y entregado a sus amos. Según los investigadores, es una buena opción para ser una mascota porque le gusta que lo consientan. Es de tamaño mediado, cola larga y ojos almendrados. Lea también: La perrita Muñeca volvió a caminar
La población de estos perros se concentra en la región cercana al río Suárez, los llanos orientales, el norte de Cundinamarca, el Eje Cafetero y el departamento de Antioquia. Además de la costa Caribe en departamentos como la Guajira y Magdalena.
Por esta razón ha sido bautizado de maneras distintas. Por ejemplo, en la costa norte se le conoce como chapolo, en Antioquia es llamado guerreador o bramador y en los santanderes le dicen perro tinajero porque caza tinajos.
Según su habilidad para cazar el sabueso fino colombiano puede costar entre 2 y 3 millones de pesos. Sin embrago, en municipios como Yacopí y La Palma (Cundinamarca) se consigue regalado. Un cachorro en otras partes de Colombia puede costar entre 200 y 500 mil pesos. Lea también: Seis señales que le indicarán que su perro llegó a la vejez
Entre otros hallazgos de la investigación se encontró que el expresidente Guillermo León Valencia lo usó para cazar y fueron los campesinos y habitantes de las zonas apartadas del país quienes lo han conservado. Pero se pretende que el animal llegue a la ciudad porque en la mayoría de los casos no vive en buenas condiciones. Lea también: ¿Perdió algo en el avión? Este perro lo encuentra
El objetivo de los estudiantes de la Universidad Nacional es desarrollar una raza canina colombiana con el sabueso fino porque cumple con las características necesarias: comparte el mismo hábitat, tiene rasgos morfológicos similares, tiene un mismo uso (cazar) y ha transmitido su genotipo a través de las generaciones.
Se espera que el sabueso fino colombiano sea reconocido como la raza nacional por la Asociación Club Canino Colombiano así como por la Federación Cinológica Internacional cuando se completen todos los soportes científicos. Lea también: Cuatro buenas razones para que le permitan llevar su perro al trabajo.
No se puede negar su parecido con los perros de raza Beagle y los sabuesos europeos traídos por españoles al país para atrapar patos. De allí heredó su habilidad para cazar, las orejas largas y pelo corto de varios colores.
El sabueso fino colombiano es un animal de carácter tranquilo, confiado y entregado a sus amos. Según los investigadores, es una buena opción para ser una mascota porque le gusta que lo consientan. Es de tamaño mediado, cola larga y ojos almendrados. Lea también: La perrita Muñeca volvió a caminar
La población de estos perros se concentra en la región cercana al río Suárez, los llanos orientales, el norte de Cundinamarca, el Eje Cafetero y el departamento de Antioquia. Además de la costa Caribe en departamentos como la Guajira y Magdalena.
Por esta razón ha sido bautizado de maneras distintas. Por ejemplo, en la costa norte se le conoce como chapolo, en Antioquia es llamado guerreador o bramador y en los santanderes le dicen perro tinajero porque caza tinajos.
Según su habilidad para cazar el sabueso fino colombiano puede costar entre 2 y 3 millones de pesos. Sin embrago, en municipios como Yacopí y La Palma (Cundinamarca) se consigue regalado. Un cachorro en otras partes de Colombia puede costar entre 200 y 500 mil pesos. Lea también: Seis señales que le indicarán que su perro llegó a la vejez
Entre otros hallazgos de la investigación se encontró que el expresidente Guillermo León Valencia lo usó para cazar y fueron los campesinos y habitantes de las zonas apartadas del país quienes lo han conservado. Pero se pretende que el animal llegue a la ciudad porque en la mayoría de los casos no vive en buenas condiciones. Lea también: ¿Perdió algo en el avión? Este perro lo encuentra
El objetivo de los estudiantes de la Universidad Nacional es desarrollar una raza canina colombiana con el sabueso fino porque cumple con las características necesarias: comparte el mismo hábitat, tiene rasgos morfológicos similares, tiene un mismo uso (cazar) y ha transmitido su genotipo a través de las generaciones.
Se espera que el sabueso fino colombiano sea reconocido como la raza nacional por la Asociación Club Canino Colombiano así como por la Federación Cinológica Internacional cuando se completen todos los soportes científicos. Lea también: Cuatro buenas razones para que le permitan llevar su perro al trabajo.
