Ambas partes esperan con ansias el primer pulso del año. Este martes la defensa de las estudiantes de la Universidad de Los Andes Laura Moreno y Jessy Quintero, detenidas por la muerte de Luis Colmenares, se enfrentará a la Fiscalía. Los abogados pedirán a un juez que las deje en libertad por cuanto hasta ahora la Fiscalía no ha presentado el escrito de acusación para el inicio del juicio.
Será un pulso de talla mayor. De un lado estará el abogado Jaime Granados en defensa de Laura, quien asegura que la ley establece que quien haya cumplido 90 días detenido sin ser acusado formalmente, deberá recobrar la libertad. A juzgar por esa norma, Laura y Jessy cumplieron ese tiempo el 7 de enero pasado. ¿Por qué razón la Fiscalía no ha presentado escrito de acusación?, pregunta Granados.
La Fiscalía y la defensa de la familia de Colmenares, en cabeza de Jaime Lombana, tienen otro argumento. Ellos se basan en que la norma establece que la Fiscalía tiene 120 días cuando se trata de un ‘concurso de delitos’, como en este caso, porque tanto Laura como Jessy están señaladas de cometer más de un delito, entre ellos homicidio y falso testimonio.
Dos pesos pesados: Jaime Lombana, abogado de la familia Colmenares, y Jaime Granados, defensor de Laura Moreno.
Se trata de un tecnicismo jurídico que deberá decidir el juez. Pero por ahora las cosas siguen igual. Laura mantiene la teoría de su inocencia, mientras que Jessy, nadie entiende por qué, sigue en silencio a pesar de haber sido la mejor amiga de Colmenares y estado a pocos metros del caño donde habría ocurrido su muerte.
Su actitud es similar a la de Carlos Cárdenas, ex novio de Laura, quien a mediados de diciembre le dijo a la Fiscalía que guardaría silencio en este proceso. Sin embargo, hay un elemento adicional que pesa en su contra. En mayo pasado, cuando el caso no era visible en los medios, Cárdenas le dijo a un fiscal que había asistido un rato a la fiesta de Halloween en Pent House. Pero extrañamente, con el tiempo, ha cambiado su versión, mientras Laura valida su argumento.
El fiscal tiene un reto muy grande. Primero deberá sostener la medida de aseguramiento contra Laura y Jessy. También sustentar la acusación contra la madre de Cárdenas y su abogada, señaladas de intervenir ilegalmente este proceso. Y, por último, conseguir las pruebas con las que pueda procesar a Cárdenas para que definir si tiene algo que ver en este doloroso episodio.
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