El nadador Jorge Iván del Valle se convirtió en el primer colombiano en atravesar el Canal de Catalina, una de las pruebas de las tres que necesita para conseguir el máximo galardón de la Asociación Mundial de Aguas Abiertas. Desde el exilio, habla sobre su hazaña más reciente y lo que espera del nuevo gobierno en cuanto apoyo al deporte.
Jorge Iván Agudelo nació en Tuluá un día de agosto de 1991, desde muy pequeño soñó con ser uno de los deportistas más grandes del país y eligió el agua como su aliado más preciado para conseguirlo. No obstante, después de conquistar varios títulos en natación carreras, se propuso conquistar las aguas abiertas del mundo.
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El pasado 5 de julio Jorge Iván comenzó una de las hazañas más arriesgadas de la natación a aguas abiertas. A las 10:32 de ese día martes, el nadador colombiano arrancó su trayecto desde la isla de Santa Catalina hasta la costa del Estado de California en Estados Unidos.
Lograrlo no sería nada fácil, pero las circunstancias no le impedirían alcanzarlo. Al fin y al cabo él mismo ya sabe lo que es luchar contra la corriente en la vida y en las aguas.
Vea la entrevista completa con Jorge Iván Agudelo:
Y es que sus posiciones políticas en pleno paro nacional del 2019 lo llevaron a vivir en el exilio. En el 2021 sufrió agresiones y amenazas de muerte en su natal Tuluá, por una persona a quien acusa de ser su agresor. No obstante, según señala en entrevista para KienyKe.com, la justicia no ha avanzado en su caso.
Durante el gobierno de Iván Duque se mostró como un férreo opositor. Esa posición lo llevó incluso a ser sacado por la Policía de un complejo acuático en Cartagena mientras participaba en los Juegos Nacionales.
“Aquí están los deportistas élite del país junto con la mediocridad y corrupción de su dirigencia”, decía la pancarta con la que posó en ese entonces.
Además, se ha enfrentado con los altos dirigentes del Instituto de Deporte y Recreación del Valle del Cauca y también de la Federación Colombiana de Natación, lo cual lo ha llevado a perder patrocinios y apoyos para lograr gestas deportivas.
El sueño de la Triple Corona
Para lograr sus sueños en el agua ha recurrido a rifas y donaciones. Así lo hizo para cumplir con la primera prueba de la triple corona, un reconocimiento de la Asociación Mundial de Aguas Abiertas para nadadores que logren cruzar el Canal de Catalina, el Canal de la Mancha y rodear la isla de Manhattan.
Lograr la triple corona le cuesta más de 40 mil dólares; la logística para cruzar el Canal de Catalina y cumplir los demás retos requiere de una inversión grande: médicos, instrumentos de navegación, yates y personal. Lo que demuestra que no solo de talento viven los deportistas.
Fueron en total 10 horas, 22 minutos y 32 segundos de nado libre para recorrer alrededor de 32 kilómetros, a temperaturas de entre 15 y 17 grados. Por cada 30 minutos de recorrido realizaba una parada de 30 segundos para hidratarse. No podía hacerlo por más tiempo para que su cuerpo no se enfriara rápidamente y pudiera sufrir una hipotermia.
“No puedes controlar nada, ni la temperatura y tampoco el viento. Todo absolutamente todo, es muy diferente a nadar en una piscina, pero gracias a todos estos entrenamientos que yo he tenido durante estos dos años trabajando con Nora fueron muy importantes”, asegura.
Nora Toledano es una nadadora mexicana que se convirtió en la primera mujer latinoamericana en obtener el reconocimiento por el que ahora Jorge trabaja incansablemente. Ella es su inspiración y su guía en medio del mar.
A la 8:51 de la mañana del pasado 6 de julio, Jorge Iván Agudelo arribó a la costa de California. Fue un momento de emoción desbordada, pero en el medio estuvo a punto de tirar la toalla, no solo por los vientos y las olas grandes que lo rodeaban.
“En horas de la mañana sentí muchas picaduras de medusas en mi cara, mi pecho, mis manos y mis pies. Y yo la verdad soy muy alérgico a esto y la reacción que tengo es inmediata. Entonces me broto de una manera impresionante; en ese momento sentí de que quizás tendría que abandonar”, cuenta.
El deportista narra, además, un segundo momento en el que las ganas de abandonar lo invadieron. En horas de la mañana, cuando vio claramente la costa de California pasó por un episodio de ansiedad al sentir que no avanzaba. “Ya no quería más porque cuando vi la tierra seguí nadando una hora, dos horas, tres horas y realmente no veía cercanía. Mis hombros los tenía totalmente destrozados”.
La suplica por más apoyo para los deportistas
Desde ya, Jorge Iván prepara el otro gran reto presupuestado para agosto: darle la vuelta completa a la isla de Manhattan, un recorrido de 48.5 kilómetros, y así obtener la segunda corona. Además, en septiembre probará aguas europeas cuando cruce los 32.5 kilómetros del Canal de la Mancha para convertirse en el primer colombiano en completar el reto más difícil a mar abierto.
Él mismo reconoce que no lo hace solamente por su propio beneficio, también lo hace por el país y por todos aquellos deportistas que sueñan con algún día llegar a convertirse en los grandes representantes del deporte nacional.
Es por eso que al próximo gobierno de Gustavo Petro le pide lo que, según él, no cumplió Iván Duque: más inversión al deporte, más apoyo y más lucha contra la corrupción en los entes deportivos.
“A veces es un poco frustrante y muy difícil porque no solamente tienes que sacar energía para tus entrenamientos, sino que tienes que sacar también energía para poder buscar los recursos. Lo que esperamos es que se nos dé el reconocimiento y el apoyo, no solamente por parte del gobierno, sino también por parte de las entidades”, señala.
“Estoy hablando en este caso de Imder Tuluá, Indervalle, la Liga del Valle, la Federación Colombiana de Natación, que de hecho hay muchísima corrupción en todas estas entidades. Lo que necesitamos es un cambio profundo para que realmente las inversiones y todo el presupuesto que llegue para el deporte sea invertido en nosotros y no en estas personas que realmente se llenan sus bolsillos y se roban la plata del deporte colombiano”, sentencia.
Las aguas recias del Canal de Catalina se parecen mucho a los padecimientos que pasan los deportistas colombianos para triunfar a nivel internacional; sortean falta de recursos, al mismo tiempo que buscan como sostenerse. Sus logros al final son aplaudidos, pero nadie se pregunta cómo llegaron hasta allí.
