
Para nadie es un secreto que la mayoría de los paisas solo toman leche pasteurizada o ‘fresca’, como la llaman. Y que el dueño absoluto de ese mercado en Antioquia es Colanta, en cabeza de Genaro Pérez, quien se queda con una tajada del 80 por ciento.
Pero eso no fue impedimento para que Alquería decidiera invertir 10 mil millones de pesos para montar su primera planta procesadora de leche Larga Vida en Medellín, producto con el cual lidera el mercado de lácteos en el centro del país, especialmente en Bogotá.
El reto es grande: convencer a los antioqueños de que dejen de comprar leche pasteurizada y compren Larga Vida, que puede durar hasta 60 días dentro de su empaque. Pero el legendario gerente de Colanta, Genaro Pérez, no está tan seguro de eso. “Aquí nos gusta la leche fresca y nosotros en Medellín nos encargamos de que llegue así todos los días hasta la puerta de los hogares y hasta la tienda de la esquina”, dice.
Alquería tiene el difícil reto de entrar en un mercado acostumbrado a consumir pasteurizada y no larga vida.
Aún así, Carlos Enrique Cavalier, presidente de Alquería, dice estar feliz de haber llegado a Antioquia: “Agradecemos que la región y su gente nos abra sus puertas y nos permita crecer junto a esta pujante tierra”.
Su planta, ubicada en el barrio Caribe, tendrá una capacidad para procesar 150 mil litros diarios de leche, que le proveerán 57 fincas de la región, con lo que aspiran a abastecer un mercado de 13.200 clientes en Medellín y 29 mil en el resto de Antioquia… si Colanta los deja.
