A los cinco años, María Angélica Padilla Julio comenzó a hacerle vestidos a sus muñecas. A esa corta edad dio las primeras muestra de su talento para el diseño de modas.
Pero solo cuando cumplió once años el asunto de la creatividad se puso serio y se dedicó a hacer colecciones de moda para sus Barbies. “Fui tomando el diseño de una forma más profesional”, confiesa.
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Con el apoyo de su mamá, María Angélica creó su propia marca llamada Mariaang –registrada en la Superintendencia de Industria y Comercio–.
Sus diseños están presentes en todas las redes sociales; ha diseñado cinco colecciones y por su buen trabajo recibió un mensaje de felicitaciones de un diseñador de la casa Dior. “Cuando un diseñador de la casa Dior te escribe, simplemente no lo puedes creer. Gracias a todos por apoyarme en cada paso”, expresó en las redes sociales. Se ha hecho tan popular que a diario recibe mensajes de Venezuela, país donde tiene la mayoría de fanáticos, Filipinas, Pakistán, México y Colombia.
Sus diseñadores favoritos son Elie Saab, Zuhair Murad, Vera Wang, Rosa Clará y la colombiana Beatriz Camacho. “Me gustaría algún día que la gente me admire por hacer cosas tan hermosas como ellos”, dice. En el futuro se ve como una diseñadora que viste a artistas reconocidos, y sueña con hacer parte de una de las tantas semanas de la moda que se organizan alrededor del mundo.
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María Angélica tiene siete Barbies para elaborar sus diseños. “Cuatro de ellas me las ha regalo mi mamá. Tienen articulaciones para que puedan posar como las modelos de verdad. Me gusta variadas, de pelo rubio, castaño, morenas. Las otras me las han regalado de cumpleaños”.
La pequeña diseñadora, colombiana de nacimiento pero que ahora vive en Alemania, no improvisa. Suele dibujar en un papel los vestidos que quiere hacerle a sus muñecas. También dedica tiempo al peinado que llevará la muñeca para que haga juego con la ocasión.
“Se me ocurren las ideas y las trato de dibujar en un papel para que no se me olviden y me queden presentes. Luego, por ejemplo, investigo cómo hacer un bolero o un vestido que quede a la medida”.
Asegura que lo que más le gusta del diseño de modas es la posibilidad de mezclar texturas y colores. “Cuando todo eso sucede sale una cosa espectacular”.
En sus inicios solo utilizaba cintas y poco a poco logró usar el hilo y la aguja para perfeccionar sus creaciones. Pero hoy en día, gracias a un regalo de su padrastro, tuvo su primera máquina de coser.
“Antes de venirme a Alemania no sabía nada de máquinas de coser. Cuando me la dieron, las instrucciones estaban en alemán pero mi mamá las consiguió en español. Las fui leyendo poco a poco y también hemos encontrado algunas amigas latinas, incluso de Colombia, que me han enseñado a manejarla”.
La elaboración de cada colección requiere dedicación y disciplina. Dedica tres días a la semana al diseño de modas, y cuando está en medio de una colección también saca tiempo los fines de semana. Desde mayo de 2014, hasta la actualidad, María Angélica ha elaborado 34 diseños en total y cinco colecciones de moda.
El matrimonio de su mamá fue suficiente inspiración para su primera colección que tuvo como tema central las novias. Aquí creó siete vestidos, algunos hechos en tela y otros en papel.
“Me parece que el matrimonio es un momento muy lindo para muchas mujeres alrededor del mundo. Me gustó diseñar y hacer algo especial para esa ocasión”.
[youtube width="549" height="366"]https://www.youtube.com/watch?v=TWLYh26r_7U[/youtube]
Otras de sus colecciones, donde ha utilizado materiales variados, son Eternal Summer de vestidos de baño hechos con bombas. En la colección Pegasos elaboró cuatro vestidos en pintura acrílica. Holiday Colecction tuvo siete vestidos de gala en tela. Para Eternal Summer Luxe Edition se hicieron cinco trajes y se utilizaron cintas de satín y seda.
Entre sus más recientes están las réplicas del vestido de la Miss Universo, Paulina Vega, y el de la abogada y esposa de George Clonney, Amal Clooney, que usó para una gala. La más reciente lleva el nombre de Tradicional y está en desarrollo.
En todo este proceso Lida Julio, mamá de María Angélica, ha sido cómplice. Fue de ella la idea de poner las creaciones de su hija en redes sociales, hacer tutoriales para que las niñas hagan los mismos diseños en casa, y tomar fotografías de las colecciones protagonizadas por las Barbies. “Tiene muchos conocimientos de marketing”, dice María Angélica.
Mientras llega el momento de trabajar para una casa de moda o tener su propia línea de ropa para mujeres reales, María Angélica continúa creando con disciplina en su cuarto, donde tiene un estante repleto de telas, tijeras, lentejuelas e hilos de colores.
Sus diseñadores favoritos son Elie Saab, Zuhair Murad, Vera Wang, Rosa Clará y la colombiana Beatriz Camacho. “Me gustaría algún día que la gente me admire por hacer cosas tan hermosas como ellos”, dice. En el futuro se ve como una diseñadora que viste a artistas reconocidos, y sueña con hacer parte de una de las tantas semanas de la moda que se organizan alrededor del mundo.
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María Angélica tiene siete Barbies para elaborar sus diseños. “Cuatro de ellas me las ha regalo mi mamá. Tienen articulaciones para que puedan posar como las modelos de verdad. Me gusta variadas, de pelo rubio, castaño, morenas. Las otras me las han regalado de cumpleaños”.
La pequeña diseñadora, colombiana de nacimiento pero que ahora vive en Alemania, no improvisa. Suele dibujar en un papel los vestidos que quiere hacerle a sus muñecas. También dedica tiempo al peinado que llevará la muñeca para que haga juego con la ocasión.
“Se me ocurren las ideas y las trato de dibujar en un papel para que no se me olviden y me queden presentes. Luego, por ejemplo, investigo cómo hacer un bolero o un vestido que quede a la medida”.
Asegura que lo que más le gusta del diseño de modas es la posibilidad de mezclar texturas y colores. “Cuando todo eso sucede sale una cosa espectacular”.
En sus inicios solo utilizaba cintas y poco a poco logró usar el hilo y la aguja para perfeccionar sus creaciones. Pero hoy en día, gracias a un regalo de su padrastro, tuvo su primera máquina de coser.
“Antes de venirme a Alemania no sabía nada de máquinas de coser. Cuando me la dieron, las instrucciones estaban en alemán pero mi mamá las consiguió en español. Las fui leyendo poco a poco y también hemos encontrado algunas amigas latinas, incluso de Colombia, que me han enseñado a manejarla”.
La elaboración de cada colección requiere dedicación y disciplina. Dedica tres días a la semana al diseño de modas, y cuando está en medio de una colección también saca tiempo los fines de semana. Desde mayo de 2014, hasta la actualidad, María Angélica ha elaborado 34 diseños en total y cinco colecciones de moda.
El matrimonio de su mamá fue suficiente inspiración para su primera colección que tuvo como tema central las novias. Aquí creó siete vestidos, algunos hechos en tela y otros en papel.
“Me parece que el matrimonio es un momento muy lindo para muchas mujeres alrededor del mundo. Me gustó diseñar y hacer algo especial para esa ocasión”.
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Otras de sus colecciones, donde ha utilizado materiales variados, son Eternal Summer de vestidos de baño hechos con bombas. En la colección Pegasos elaboró cuatro vestidos en pintura acrílica. Holiday Colecction tuvo siete vestidos de gala en tela. Para Eternal Summer Luxe Edition se hicieron cinco trajes y se utilizaron cintas de satín y seda.
Entre sus más recientes están las réplicas del vestido de la Miss Universo, Paulina Vega, y el de la abogada y esposa de George Clonney, Amal Clooney, que usó para una gala. La más reciente lleva el nombre de Tradicional y está en desarrollo.
En todo este proceso Lida Julio, mamá de María Angélica, ha sido cómplice. Fue de ella la idea de poner las creaciones de su hija en redes sociales, hacer tutoriales para que las niñas hagan los mismos diseños en casa, y tomar fotografías de las colecciones protagonizadas por las Barbies. “Tiene muchos conocimientos de marketing”, dice María Angélica.
Mientras llega el momento de trabajar para una casa de moda o tener su propia línea de ropa para mujeres reales, María Angélica continúa creando con disciplina en su cuarto, donde tiene un estante repleto de telas, tijeras, lentejuelas e hilos de colores.
