El portal RawStory ha publicado esta lista en la que especifica cómo se afecta el cerebro en esta época del año, provocando reacciones en el cuerpo y generando cambios en los estados de ánimo:
Desorden afectivo específico a la época
Investigadores creen que al menos un tercio de la población inglesa sufre de este desorden. Se caracteriza por cambios severos en el estado de ánimo debido a los bajos niveles de serotonina y melatonina, lo que hace que las personas afectadas requieran de más luz solar. Cuando la luz entra en contacto con la retina en la parte de atrás de ojo, señales eléctricas son enviadas al hipotálamo; parte del cerebro que controla el sueño, el apetito, la temperatura corporal, la libido y el humor. Cuando no hay suficiente luz estas funciones se hacen más lentas.
Comer de más
Comer de más es casi algo obligatorio durante las fiestas que celebran la Navidad, y la indigestión es una consecuencia muy familiar. El problema es que comer de más tiene un efecto mucho más complicado que estimula el camino entre el hipotálamo y el sistema inmunológico, que resulta en una respuesta excesiva del sistema inmunológico y ocasiona una inflamación leve en el cuerpo. Esta es la razón por la que luego de comer mucho la gente se siente mal. Comer de más durante largos períodos ocasiona inflamación crónica, lo que desemboca en diabetes tipo 2 y problemas cardiovasculares.
Demasiado alcohol
Las pocas sesiones de beber mucho alcohol durante la Navidad y Fin de Año no generan efectos a largo plazo, pero se pueden experimentar síntomas a corto plazo como ansiedad e irritabilidad. Dejar de beber abruptamente genera hiperexitabilidad del cerebro, debido a un efecto de liberación repentina de los receptores que han resultado desinhibidos por el alcohol.
Demasiada televisión
Durante el día de Navidad, el inglés promedio llega a ver hasta ocho horas de televisión. La gente se niega a aceptar el efecto que tiene la televisión, pero la realidad es que cualquier actividad realizada durante tanto tiempo tiene un efecto con consecuencias neurológicas a corto plazo. La televisión favorece las olas alfa bajas en el cerebro, las cuales están asociadas con la relajación y la sugestión, algo de lo que los publicistas se aprovechan para asociar sus marcas con sentimientos positivos. Pasar demasiado tiempo con el cerebro operando con olas alfa bajas puede resultar en complicaciones de concentración cuando se vuelve al trabajo después de las fiestas.
Estrés familiar
La Navidad es una época para estar en familia, lo que no significa una bendición para todo el mundo. Cualquier tipo de estrés genera la liberación de adrenalina e hidrocortisona, que es una respuesta automática del cuerpo desde los tiempos de los cavernícolas. Existe una parte del cerebro que es especialmente vulnerable a la subida de los niveles de hidrocortisona: el hipocampo (lo que afecta la capacidad de realizar varias actividades al mismo tiempo y afecta la memoria). La mejor manera de contrarrestar estos efectos es haciendo ejercicio y durmiendo bien, lo que estimula el crecimiento y la reparación de las células del hipocampo y genera un mejor estado de ánimo y nos vuelve menos susceptibles al estrés mediante una menor liberación de hidrocortisona.
¿Qué le hace la Navidad al cerebro?
Vie, 21/12/2012 - 05:31
El portal RawStory ha publicado esta lista en la que especifica cómo se afecta el cerebro en esta época del año, provocando reacciones en el cuerpo y generando cambios en los estados de