Tuvieron que pasar poco más de 32 años desde la muerte de Carlos Pizarro, para que Colombia finalmente conociera sobre la existencia de su hijo no conocido, quien alejado de la vida pública, hoy quiere recuperar el apellido de su padre y quizá, a futuro, retomar su lucha política.
"Siento que ya es algo que me lo está pidiendo mi vida. Siento que lo necesito para mí. Recuperar mi identidad es algo importante. Quiero llevar en alto el nombre de mi Papá. Él será mi ídolo y eso no lo va a cambiar nadie", contó este hijo no conocido de uno de los actores políticos más importantes de la historia colombiana.
Su nombre, así como el de su progenitor, es Carlos y se formó como ingeniero agroindustrial. Una carrera muy alejada de aquella que marcó la vida y obra de Carlos Pizarro Leongómez, quien fue asesinado el 26 de abril de 1990, tan solo dos meses después de firmar la paz con el gobierno de Virgilio Barco.
"Desde el primer momento que yo tenía uso de razón, mi mamá nunca me lo negó, antes fue algo muy lindo porque presentó a mi familia siempre me decían: Pizarrito, te ves muy parecido ¡Eh Ponte el sombrero!, siempre fue algo muy especial para mí, de hecho”, relató ante los micrófonos de Caracol Radio.
Sin embargo, Carlos, el nombre de este hijo 'no conocido' nunca ignoró la identidad de su padre. Según contó, desde siempre ha sido muy cercano a sus medio hermanas: María José Pizarro y María del Mar Pizarro, hijas del matrimonio entre Carlos Pizarro y Myriam Rodríguez. En ese sentido, señaló que María José fue quien se encargó desde muy joven de que él no olvidara sus raíces, mostrándole documentales y contándole historias de quien pudo ser el primer presidente de izquierda en Colombia, si los ojos del paramilitarismo (presuntamente) no se hubieran posado en él.
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A pesar de tener claro su origen familiar, Carlos no lleva el apellido ‘Pizarro’ por decisión de su madre. Quizá el temor de alguna represalia de quienes ultimaron a Carlos Pizarro Leongómez, la llevó a tomar tal determinación, lo mismo los habría llevado a mantener un perfil bajo durante la década de los 90’s, en la que el exterminio de todo lo que oliera a izquierda llevó prácticamente a la extinción de la Unión Patriótica.
Hoy, con la llegada de Gustavo Petro al poder y una significativa desescalada de la guerra política, Carlos no se cierra a la posibilidad de retomar los caminos de su padre e incursionar en la política. Sin embargo, es prudente a la hora de señalar que “debe prepararse”.
“Soy ingeniero agroindustrial, me preparé para otras cosas pero lo llevo en la sangre. No lo puedo negar. (...) Me gustaría prepararme para en algún momento entrar en esos campos y estoy en ese proceso, de ser cada vez mejor persona”, acotó.
