Ganarse una patente es tan difícil como obtener un premio Nobel. Sin embargo, tres colombianos que trabajan para un laboratorio nacional, le quitaron a las grandes multinacionales este privilegio.
Ángela Ahumada, Jorge Useche y Rafael Martínez, químicos farmacéuticos de Galeno S.A, filial del laboratorio La Santé, trabajaron durante año y medio para crear un nuevo medicamento. Pero no imaginaron que Derma Q, una crema para tratar la dermatitis, hongos, infecciones y quemaduras en la piel, sería un invento único en el mundo.
Sentados en el laboratorio donde probaron una y otra vez su creación, los inventores confiesan que no tenían muchas pretensiones, solo querían satisfacer una necesidad del mercado. Tampoco esperaban obtener una patente, aquella que les permitirá comercializar el medicamento de manera exclusiva durante 20 años, definir el precio de venta y por supuesto no tener competencia.
Desde su lanzamiento hace dos años, Derma Q ha tenido ventas de 2.500 millones de pesos y su desarrollo costó alrededor de 400 millones de pesos. Próximamente se lanzará en Venezuela y Ecuador. Además, luego de cumplir con una serie de estudios clínicos se pretende comercializar en Estados Unidos, Europa y Asia.
Jorge Useche y Ángela Ahumada trabajan en el desarrollo de nuevos medicamentos.
¿Cómo inventaron Derma Q?
El trabajo más difícil estuvo a cargo de Ángela Ahumada, quien ha inventado entre 30 y 35 productos. Ella tuvo la responsabilidad de investigar, de manera exhaustiva, los componente para determinar la medida exacta de cada uno.
“Era una fórmula inestable. En esencia se trata de unir aceite y agua. No es fácil porque naturalmente se separan. Fue una proeza unir estas tres sustancias”, precisa Rafael Martínez, director técnico del área.
Derma Q fue probado en el frío, calor y humedad. También se comprobó su absorción y penetración en piel humana, de rata y oreja de cerdo. Debía garantizarse su efecto terapéutico, que la mezcla pudiera salir al mercado y permanecer dos años en una vitrina. También se realizó un estudio con un grupo de personas con ciertas enfermedades de la piel. Así se demostró su efectividad y velocidad de acción. Al menos se hicieron unas cien pruebas para llegar a la fórmula final.
Rafael Martínez, quien está en su año de jubilación, fue clave en el desarrollo del medicamento.
Luego vino un segundo reto: pasar de producir cinco kilos a cincuenta. “Cuando se inventa algo existe el riesgo que implementarlo no sea sencillo. Lograr aplicación industrial y su fabricación es compleja. Llevarlo de lo pequeño a lo industrial es muy difícil”, comenta Martínez. Finalmente, largas jornadas de trabajo y ensayos en el laboratorio permitieron la producción masiva.
Entre las ventajas de Derma Q están la de mayor penetración, es indicado para manejar inflamaciones de origen bacteriano o por un hongo en la piel. También para tratar una dermatitis, quemaduras con riesgo de infección y heridas en la piel. Por esta razón, es eficiente en víctimas de las minas antipersonal.
Así se logró la patente
La patente fue algo sorpresivo para los inventores. “Es como de no creérnosla. Uno lee las patentes de compañías internacionales y a veces los cambios que ellos proponen en los medicamentos son muy pequeños”, afirma Useche.
El producto que desarrollaron cumplió todos los requisitos para ser considerado único: novedoso, de alto nivel inventivo y con aplicación industrial.
“Las patentes han sido un tema que han estado más en la parte de las multinacionales porque ellos patentan globalmente y simultáneamente. No hay confianza en lo que se hace”, concluye Martínez.
Según los inventores, el medicamento es muy útil para las víctimas de minas antipersonal.
En Colombia el proceso para obtener una patente tarda en promedio 36 meses. Durante este tiempo la Superintendencia de Industria y Comercio hace un estudio exhaustivo del invento. En el país se presentan cerca de 2.000 solicitudes al año, en su mayoría, inventos relacionados con la solución de problemas técnicos en el área de las ciencias médicas y aparatos mecánicos.
A nivel local Ecopetrol, las universidades Nacional, De Antioquia, Del Valle y la Industrial de Santander, son quienes más solicitan patentes. En el exterior Wyeth, Novartis, Bayer, Astra y Astrazeneca, encabezan el listado.
Si bien ganar la batalla a los grandes laboratorios en el tema de las patentes es difícil. Ángela, Jorge y Rafael dicen que a veces el éxito se resume en tomar la iniciativa.
Tres colombianos le ganaron una patente a los grandes laboratorios
Mar, 13/08/2013 - 15:09
Ganarse una patente es tan difícil como obtener un premio Nobel. Sin embargo, tres colombianos que trabajan para un laboratorio nacional, le quitaron a las grandes multinacionales este privilegio.