Me contó un pajarito que desde el 7 de agosto de 2010 cuando salió de la Casa de Nariño, que no era de Nariño, sino su hogar por ocho largos años, aquel personaje curioso frentero, tropelero y con lenguaje pugilístico, encontró en las redes sociales un desfogue para pronunciar sus opiniones.
Aquel día que se conmemoraban 191 años de la Batalla de Boyacá, cuando todas las cámaras enfocaban al mandatario #59, por allá ,a lo lejos se veía “El Innombrable” solitario, pensativo e impotente, tal vez maquinando cómo gobernaría en cuerpo ajeno.
Pero su ilusión duró poco, sus ministros impolutos y que hoy adornan los pabellones de varios centros de reclusión, fueron remplazados por contradictores y rivales, cada nombramiento fue como una puñalada en su espalda.
Entonces para desdicha de los Twitteros, abrió una cuenta @______________ comenzó a trinar por la herida de una forma muy particular y confusa con cierto tufillo de enfado. @danielsampero: “_____ suele escribir en Twitter como habla Navarro Wolf: Se come las letras, se le pegan las consonantes. Es imposible entenderle”
En sus microcomentarios defiende su gobierno, sus funcionarios impolutos, sus hijos los emprendedores y ataca a periodistas nacionales y extranjeros, opositores, senadores, ministros, políticos, ex presidentes, columnistas, caricaturistas, presidentes nacionales y extranjeros, premios Nobel, juristas, candidatos, ONG`s, y en general a cualquiera que cuestione o discrepe sus acciones.
Tal fue su disgusto y su rabia que cambió su frase de “trabajar, trabajar y trabajar” por criticar, criticar y criticar, no le gustaba nada, ni el gobierno, ni los nombramientos, ni las decisiones, ni la ley de victimas, ni la palabra conflicto, ni el dialogo, absolutamente nada.
Hace poco tuvo la magnifica idea de recuperar su patrimonio electoral, aquel que catapultó a su sucesor, se la jugo por varios candidatos en ciudades grandes, departamentos y municipios chicos, recorrió el país y las plazas públicas alzando megáfonos, bailando el Aserejé, cuestionando la administración actual y defendiendo su gobierno, pero no logro cogerle el paso a la victoria y le tocó bailar con la más fea, la insípida derrota.
Dicen que quiere recuperar el poder a como de lugar, hace tres meses que practica coreografías y karaoke, no contesta el celular, incluso le ha cogido tanto amor a la música, que le dedicó al presidente de la Unidad Nacional la canción “si no le contesto se desespera” y que espera debutar en Yo me llamo con: “pero sigo siendo el rey”.
Estas discrepancias entre mandatarios ha generado infidelidades las cuales han ido congelando la pasión del matrimonio, el nuevo mejor amigo se interpuso deteriorando la geometría de la relación, convirtiéndolo así en un triangulo amoroso.
Ahora el ex numero uno aparece de nuevo con otro escandalo, los audios revelados por @cmilanoticia donde: aconseja a un grupo de opositores y antichavistas a que le reclamen a la actual administración colombiana por su cercanía con su nuevo mejor amigo. Este nuevo dolor de cabeza es devolverle la bofetada y felices los cuatro.
Será que aquella abrumadora derrota política, su falta de credibilidad, sus múltiples escándalos, están haciendo que el rey sin trono deje la política y se retire a hacer oposición asesorando desde otros países a sus detractores ya que aquí como dice el dicho: No le comimos más cuento.
@yojosealejandro
