Sobre la cabeza saliva del firmamento.
Si es blanco y chiquito de pajarito cae.
Si es grande y café, ni pa´ qué pregunta.
Dicen que es suerte si a uno lo caga una paloma. Lo cual conlleva la vieja frase: Qué tal si las vacas volaran. Pues bien, en épocas electorales, después de escuchar análisis de expertos, intuyendo lo que se viene y observando lo que se especula, podemos hacer un análisis gastronómico. Por qué: tajadas, lentejas, ponqué, LAMERmelada, repetimos para hablar eufemísticamente de lo que se ha venido pelando el cobre o mostrando el c...OLLL, que nos muestran y nos cantan: corrupción clientelar que alimenta, desde hace buen tiempo, mucho, mucho tiempo -diremos con los cuenteros-. Por eso, y me gusta, se invierte la ecuación: de paz y guerra, Santos y Vargas, Santos y Uribe, a corrupción y no corrupción. Por eso, aunque no podamos escampar bajo un paraguas, veamos volar la paloma, sintamos la gotica y veamos la plasta (pero a la inversa como ocurre en el país del Sagrado Corazón de Alvarito y bajo la mantilla del Procurador General de la Nación y su Legión).
Boñiga celeste: De los auxilios parlamentarios pasando por las partidas regionales o partidas presupuestales hasta llegar a los cupos indicativos (chequera y billete, corrupción pura y dura, gritan Sirios y Troyanos, Uribistas y los llamados, lucho lo dice, Ubérrimos). Ruido de la urna de cristal y del famoso computador de palacio. Los comentaristas lo dicen sin vergüenza y el gobierno, en U, ni se sonroja. Con razón el presidente del presidente, exministro Díaz-Granados, puede restregarnos, como el perrito de Angelino, lo que cae: “He visto las denuncias sobre los cupos indicativos y la mermelada como la quieren denominar. La explicación que ha dado el Gobierno es que una cosa es la gestión que pueda hacer un congresista a nombre de su región y otra es la corrupción apalancada por dineros públicos”. No obstante, sacando el c...OLLL, señala: “No puedo responder por lo que cada candidato hizo”.
Techo:
“Quiero una campaña de juego limpio, no de guerra sucia. (...) Que esta sea una campaña basada en la verdad, no en las mentiras (…) Que la campaña sea legal, donde el fin no justifique los medios” (JMS).
El pajarito volador: Como lo que hay que mostrar discursivamente, sin responder por las acusaciones de la aceitada de la maquinaria y sus billoncitos, es la manchita blanca en la solapa, aparece la inUcentada: “Se prohíbe la realización de rifas, bazares, bingos, remates, loterías, o cualquier tipo de evento para la recaudación de fondos o donaciones en especie para la promoción de la campaña presidencial, que no estén autorizados expresamente por la gerencia”, reza una disposición de la campaña de Santos en búsqueda de trasparencia. La cual se traduce en el slogan, confesión de culpa, Hemos hecho mucho, falta mucho por hacer.
Lo cual es copiado por el CD cuando, en circular, del director espiritual Hoyos, se lee: “Debemos actuar con total respeto por las demás campañas y candidatos. Colombia está hastiada de insultos e irrespetos (…) se puede ser franco, sincero y directo sin caer en la grosería: lo cortés no quita lo valiente. (…) Cuando recibamos burlas, debemos tomarlas con sentido del humor”
- Ja, ja… y empezó el invierno.
[caption id="attachment_377343" align="aligncenter" width="686"] Editorial del Colombiano, tomada de Internet.[/caption]