Señores de las FARC ¿No les provoca un tintico?

Sáb, 24/08/2013 - 01:00
Como ustedes, los negociadores farianos de La Habana, se encuentran tan ocupados pidiendo el oro y el moro en los descansos de su ocupada agenda, he realizado una breve e incluyente encuesta que
Como ustedes, los negociadores farianos de La Habana, se encuentran tan ocupados pidiendo el oro y el moro en los descansos de su ocupada agenda, he realizado una breve e incluyente encuesta que sin duda será de gran provecho para que logren comprender cómo es hoy Colombia.
Mi encuesta es mucho mejor que la de cualquier entidad especializada, lo digo sin ruborizarme, y lo certifico aclarando que en ella participaron (muchas veces sin saberlo, lo que hace más sinceras sus respuestas) taxistas, usuarios de transmilenio, compradores de supermercados, cajeros, peluqueros y manicuristas, borrachos de cocteles, poetas, artistas y cazatalentos, asistentes a salas de cine, chateadores de redes sociales, usuarios de parques, esquinas y monumentos, comensales de corrientazos, vendedores ambulantes y peatones.
A la pregunta ¿Qué deben saber los dirigentes de las Farc, si se convierten en partido político en Colombia, sobre nuestro país? Las mejores y más votadas respuestas fueron las siguientes:
1. La JUCO (juventudes comunistas) ya es la VICO (viejitos comunistas) y eso cambia sus necesidades. Por ejemplo, ya no marchan sino que ocupan sillas en los parques, ya no se reúnen a leer a Marx sino la reforma a la ley de pensiones, etc. Además, muchos ya no votan, unos porque evitan salir a la calle y odian las multitudes, otros porque después de Gaitán “se jodió Colombia”.
2. Las emisoras comunitarias, que ustedes han pedido para hacer política, ahora son comunitarias de verdad. Eso significa que las 1.200 y tantas existentes son manejadas por comunidades de pequeños poblados que tienen juntas directivas y parrillas de programación discutidas por todos y que hacen vacas, empanadas bailables y festivales para pagar anualmente sus impuestos al Ministerio. No existen emisoras de partidos políticos y si quieren tener una deben comenzar por hacer lo mismo que las comunidades para ganársela. O también pueden pautar, pero eso vale dinero.
3. Acerca de su capital de votantes (porque ningún encuestado estuvo de acuerdo en que ustedes aterricen en el Congreso, las gobernaciones o alcaldías sin someterse al escrutinio ciudadano) está muy capturado. Los mamertos, izquierdosos, comunistas, socialistas, maoístas, fecodistas, trosquistas, moirosos,  la social bacanería y hasta algunas tribus urbanas militan ahora con Clara López y Jorge Robledo. También quedan varios con Gustavo Petro y otros más con Navarro Wolf quien ha realizado buenas gestiones elegido democráticamente. Esos quinientos mil y tantos votos del sector ya tienen dueño.
4. El campesinado colombiano, del cual proviene la mitad de los encuestados (hijos de campesinos que llegaron a las ciudades) ya no son los de antes. Quieren el progreso, la agroindustria, las asociaciones campesinas, el desarrollo tecnológico, la productividad y su inserción activa en el país. Y quieren, más que todo, ser ciudadanos de primera participantes (no representados) en las alianzas, licitaciones, proyectos, peticiones y propuestas que desde el Estado, la cooperación y la empresa privada se generen.  Se los juro: ya no hay convidados de piedra, todos ejercen, o quieren hacerlo, sus derechos fundamentales. Y no se dejan “empujar” hacia intereses particulares o ZRC que ellos no conocen ni han pedido ni saben si funcionarán.
La Habana Delegados de las FARC
 5. Las campañas políticas ya no son lo que eran. Ahora se realizan desde redes sociales, teleconferencias, SMS, flashmob y plataformas web. Los colombianos dejaron de leer volantes, pasquines, voz proletaria y periódicos “serios” para decidir por quién votar.
 6. El español ya no es el mismo. Ahora se habla el lenguaje de los community manager y el español 2.0, es decir, si en sus discursos van a utilizar palabras como “plusvalía”, “proletariado”, “yanquis” “imperialismo” “burguesía” y similares, les informo que ya murieron, junto con el lenguaje grecoquindiano que tanto nos atrajo en el siglo pasado. Ahora, y esto es muy importante, deben hablar  a ciudadanos que viven en comunidades, que construyen capital social e identidad, que creen en el Estado y que saben que dentro de sus valores el primero es la seguridad y el segundo la legalidad.
 7. Los validadores de la izquierda, de estrato veinte (bilingües, afiliados a algún partido internacional de izquierda, con maestrías y solvencia económica) ya no son lo que eran. Envejecieron entre cocteles y wisky, hablando mal del país y aceptando cargos en el gobierno, señalando la paja en el ojo ajeno y escondiendo su propia viga, maldiciendo entre los jóvenes y vacacionando en Europa, recibiendo dividendos familiares, laborando poco o nada y pidiendo favores a sus amigotes. Ningún colombiano de a pie les cree cuando escriben columnas, son consultados acerca de algo o se lanzan por alguna red a denostar del Estado colombiano. Y no les cree porque todos sabemos que lo hacen para seguir vigentes, para enlucir su ego y por aburrimiento antes de comenzar la temporada de verano en el Caribe. Así que no cuenten con ellos.
8. Europa ya no es como antes. Más de la mitad de los encuestados pidieron que por favor les cuente que Europa está quebrada, que ahora son los españoles quienes nos invaden por el desempleo en su país, que ellos ya no se creen el cuento robinwoodiano de ustedes, que ya saben (porque lo consultan en internet) quiénes son y qué han hecho. El ingenuote europeo que los miraba con admiración y que creía que estaba salvando a un pobre y olvidado  país con algunos euros donados a su grupo, se terminó. Ahora están pobres, desempleados y sin tiempo ni ganas para hacer de voluntarios con sus exiguas donaciones de antes.
 9. Las víctimas y sus familiares no comen cuento. Esto significa que, si en algún momento ustedes se sintieron bien porque una madre, una hija o una esposa dijo públicamente que los perdonaba y que por favor le devolvieran a su ser querido, deben saber que lo hizo para preservar la vida de su allegado y no porque creyera en ustedes ni en sus postulados. Toda Colombia continúa la espera de su arrepentimiento real, de su petición de perdón verdadera y compungida, y sobretodo de la entrega de bienes para repararlos.
10. Finalmente, una recomendación realizada por muchos de los encuestados: contemplar la posibilidad de realizar algún estudio en políticas públicas (puede ser desde la cárcel, ya existe la universidad a distancia) antes de querer saltar a la arena política. Según ellos, los nuevos políticos colombianos (los que quieren elegir) serán personas que conozcan a fondo el país y sus leyes, que tengan una visión del territorio, que respeten a las comunidades y sus decisiones, que estudien; así podrán hacer mejores cosas y no asaltar al erario público o la buena fe ciudadana. La época de los políticos con primaria y discurso en la plaza, ya no existe.
Ahora si ¿No les provoca un tintico?
Más KienyKe
El alcalde realizó un llamado de atención al gobierno nacional tras varias desiciones que, argumenta, pueden ir en contra de la autonomía territorial.
El exdirector de la UNGRD se pronunció en redes sociales tras acercarse a declarar a la Fiscalía.
El anuncio se dio después de que la delegación negociadora de la guerrilla anunciara que volverían a secuestrar como método de financiación.
Esta petición estaría dirigida especialmente a la Fiscalía General de la Nación tras el escándalo de corrupción.
Kien Opina