Under the Skin: Bajo la piel de una extraterrestre

Una alienígena llega al planeta Tierra para matar y capturar personas. La criatura que se apodera del sexy cuerpo de Scarlett Johansson se adapta rápidamente a la atmósfera urbana. Como una pantera al asecho, busca a su presa minuciosamente. Sin embargo, la tarea no será nada fácil, este extraterrestre también experimenta deseos. El largometraje de Jonathan Glazer, basado en el libro de ciencia ficción del mismo nombre de Michael Faber, nos transporta a un mundo inhóspito y silencioso en Escocia. La historia puede ser tediosa y repetitiva en varias secuencias, empero la fotografía y la actuación es lo mejor. Cabe resaltar que la mayoría de escenas se filmaron con cámaras ocultas y las personas que eran abordadas por la protagonista (el único actor profesional era Scarlett) no sabían que estaban siendo filmadas. Además de eso uno de los personajes que aparece de rostro desfigurado, Adam Pearson, en realidad sufre de neurofibromatosis. Lo curioso es que, los  transeúntes que se encuentra la extraterrestre tienen comportamientos confusos y torpes. En cuanto a la cinematografía, el ambiente frío y oscuro se conserva a lo largo de toda la historia. El aspecto hiperrealista cuando atrapa a los humanos es minimalista. Acostumbrados a los entornos coloridos y bulliciosos del mundo occidental, se acentúa el monocromático. Sin grandes efectos especiales la película cautiva y le da trascendencia a la narrativa del silencio. La banda sonora de Under the Skin combina, electrónica, sinfonía, pop y cluster largos, que asemejan a la música que acostumbra usar Stanley Kubrick. Micachu, la compositora, mimetiza los golpes largos, y provoca retardo temporal. La acústica acompaña el ambiente inusual y extraño en el que se sumerge la sexy alienígena, el mundo de los humanos. Como muchas otras películas (incluyo Interstellar) seguramente en diez años Under the Skin se convertirá en un largometraje de culto. @JuanCachastan