Si bien es cierto que desde ministerios y oficinas del gobierno fueron impulsadas esas expresiones de solidaridad con la paz, también lo es que la Plaza de Bolívar resultó rebosada por miles de jóvenes, como nunca antes en muchos años.
El alcalde de Bogotá, cuyo despacho da al enorme “recinto”, escribió que “de todas las marchas que he visto por la ventana de mi oficina actual, la de anoche es la única que llenó la Plaza de Bolívar (y la desbordó).
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También hubo manifestaciones en las principales capitales del país (Cali, Medellín, Barranquilla, Pereira, entre otras, con nutrida presencia, silencio estremecedor y orden absoluto.
Rios humanos se vieron en Bogotá y el país, en demostración de solidaridad con la paz y para presionar tácitamente la rápida evolución de los diálogos del gobierno y la oposición, que permitan superar la incertidumbre de hoy, tras la derrota del SI en el plebiscito del domingo anterior.
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Las movilizaciones comenzaron a darse en momentos en que hablaban en Palacio el presidente Santos y el expresidente Uribe, hacia las 4 de la tarde. En Bogotá miles de personas, especialmente jóvenes, caminaron hasta la Plaza de Bolívar. Y la coparon.
Las reacciones fueron optimistas, al punto de que líderes de las Farc expresaron emocionados en las redes sociales que con actos de solidaridad como los mencionados “juramos no dar marcha atrás”.
Las conversaciones al más alto nivel continuarán hoy, en busca de salidas para pactar la paz con las Farc, sin desconocer a la mitad de los colombianos (algo más) que votaron NO el domingo.
