Su nombre completo era Elvis Aron Presley. Vino a este mundo para cambiar la música. Vino a este mundo para ser ‘el Rey’. Y lo logró. Han pasado 40 años desde su muerte y aún sigue siendo una leyenda. Y no sólo una leyenda: también es uno de los íconos culturales más importantes del siglo XX.
Elvis nació en Tupelo, Misisipi, el 8 de enero de 1935. Con él vino al mundo un hermano gemelo que murió 35 minutos antes que Elvis. Durante su infancia, vivió bastantes penurias económicas por la escasa ambición de su padre que pasaba de un trabajo a otro. Por esa razón, las riendas de la familia las llevaba su madre Gladys Love Presley.
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Su primera inmersión en la música fue en 1941, cuando impresionó a una de sus maestras al cantar un ‘Old shep’ de Red Foley. En aquella ocasión alcanzó el quinto puesto en un concurso de canto. Al año de ese episodio, como regalo de cumpleaños, recibió su primer guitarra. Inmediatamente comenzó con las clases. “Tomé la guitarra, miré a la gente tocarla y aprendí un poco. Pero nunca hubiera cantado en público, era muy tímido al respecto”, dijo en una entrevista.
Por cuestiones económicas la familia se mudó a Memphis, Tennessee, en 1948. Allí, el rey vivió su adolescencia. Académicamente no fue un estudiante destacado. Sólo sobresalía por su talento para el canto. Entonces empezó a practicar la guitarra con algunos vecinos hasta incluso llegar a dar algunos recitales en los alrededores de su escuela.
Nunca contó con formación musical, sin embargo, su oído era excepcional: sacaba las canciones con solo oírlas. En esos días solía ir a tiendas musicales donde había gramófonos para poder escuchar las producciones de sus artistas favoritos.
La fama
En agosto de 1953 Elvis hizo sus primeras grabaciones en los estudios Sun records. Él mismo pagó la producción, con el objetivo de hacer un regalo a su madre. Se llamaba ‘My happiness’. Sin embargo, también tenía la esperanza de ser descubierto. Gustó mucho a los ejecutivos, por lo que se sugirió que se retuviera con la disquera. A pesar de todo, aún tenía un camino largo por recorrer, y muchos fracasos para llegar a ser lo que fue. Mientras tanto, trabajó como camionero.
Entonces uno de los productores dijo “Si pudiera encontrar a un blanco que tuviera un sonido negro y un sentimiento negro, podría hacer mil millones de dólares”. Ese era Elvis. Así siguió por un par de años, produciendo discos sencillos y sonando con bajo perfil en radios locales. Su golpe de suerte definitivo llegó en 1958 cuando firmó con la disquera RCA. Luego se presentó en televisión por primera vez. Cantó el tema ‘Heartbreak hotel’, que en pocas semanas se posicionó como primero en las listas. A partir de ese momento, la fama del rey fue creciendo exponencialmente.
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Elvis hizo películas, grabó varios discos que fueron número uno y realizó exitosas giras por todo Estados Unidos. Esa vertiginosa subida al Olimpo del Rock se truncó en 1958, cuando debió prestar servicio militar. Estando allá tuvo su primer acercamiento con las anfetaminas. Cuando volvió, se dedicó más que todo al cine. Duró 7 años en eso: del 60 al 67. Por supuesto que componía la mayor parte de la banda sonora de esas películas.
Desde el 68 al 73 retomó con mucho éxito su carrera musical. Además volvió a dar giras de larga duración. La exigencia con la que manejaba su carrera, el estrés, el cansancio, el abuso de algunas drogas, fueron las culpables de que el Rey se fuera apagando. Sin embargo siguió trabajando incansablemente.
A principios de 1977, un periodista escribió: “para principios de 1977 Elvis Presley se había convertido en una caricatura grotesca de su elegante y enérgica forma de ser. Un tanto pasado de peso y con su mente opacada por la farmacopea que diariamente ingería, era casi incapaz de sacar adelante sus breves conciertos”.
Elvis Presley murió a las 3:30 de la tarde del 18 de agosto de 1977 por un infarto agudo al miocardio, causado, muy seguramente, por el abuso de drogas.
Le decían el Rey. Este hombre cambió la música para siempre. Este hombre es una de las figuras más importantes del siglo XX. El último año de su vida, ‘El Rey’ vivió un declive progresivo: subió de peso, fue perdiendo sus calidades vocales; lo aquejaban terribles enfermedades. Elvis ‘dejó el edificio’, el 16 de agosto de 1977. 40 años sin el Rey ¿Qué habría sido de la música si él siguiera entre nosotros?
A pesar de que desapareció de este mundo, Elvis nunca dejó de facturar. Y de facturar mucho. Por más de 40 años ha permanecido sobre su trono, firme e inamovible. El culto de los fanáticos que se desarrolló después en torno a la figura del Rey, ha dejado una cuantiosa herencia que no ha parado de crecer.
