“Mar hambrienta, mar serena, mar inquieta, se traga a los hombres, se bebe los ríos, nunca satisfecha, siempre igual, vieja cruel y coqueta, que se enfermó en el embarazo de un diluvio naval”, así empieza la poesía titulada “Mar Cruel”, del almirante mejicano de apellido Espino.
Es bien sabido por definicion que el Mar es una masa de agua salada que cubre aproximadamente las tres cuartas partes de la superficie terrestre y que está en una region determinada. De manera tal que en este escrito quiero conversar sobre algunos de esos mares, que estudiamos y aprendimos en las historias marítimas y navales, leímos en textos y novelas o nos enseñaron en las aulas, cuando estudiamos la navegación costera y astronómica y que por alguna razón quedaron grabados en nuestros corazones de los marinos que seriamos.
Al final el MAR es nuestro medio y con la ubicación de nuestro país, en la llamada esquina de Suramérica, donde poseemos costas en el Caribe y en el Pacifico, somos mas que privilegiados, pero desafortunadamente con mente mediterránea. Decía Gonzalo Arango el poeta nadaista: “Colombia es un país bañado de mares, menos por el corazón de los marinos, donde la Patria es Amor”.
Por el momento mencionaré solo tres mares, que me llamaron la atención, antes aclarando que son muchísimos mas y que en otros escritos hablaré de ellos. “…. Ya tengo las amarras sencillas en mi velero y daré la orden de subir a la jarcia y largar trapos, para hacernos a la mar…”:
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CANTÁBRICO.
Debo empezar hablando del golfo de Vizcaya (en euskera “Bizkaiko golkoa”; en francés “golfe de Gascogne”) es un amplio golfo del océano Atlántico Norte localizado en la parte occidental de Europa. Se extiende desde el cabo Ortegal en Galicia (España) hasta la punta de Perm en la isla de Ouessant en Bretaña (Francia). Baña las costas de las comunidades autónomas españolas de Galicia, Asturias, Cantabria y el País Vasco, así como las regiones francesas de Nueva Aquitania, Países del Loira y Bretaña.
En España se considera el golfo de Vizcaya como la parte más oriental del mar Cantábrico, con la que se designa el mar litoral que baña la costa norte de España y la costa suroeste de Francia y que correspondería con lo que los romanos en el siglo I a. C. nombraron como Sinus Cantabrorum («bahía de los cántabros»). La parte más septentrional era denominada Sinus Aquitanus o Mare Aquitanicum (mar de los aquitanos).
Resumo entonces que el Mar Cantábrico es el mar litoral del océano Atlántico que abarca la mayor parte de la costa norte de España y el extremo suroeste de la costa atlántica de Francia. Baña 800 kilómetros de costa compartida por las provincias de la Coruña y Lugo (Galicia), Asturias, Cantabria, Vizcaya y Guipúzcoa (País Vasco), que por cierto allí nacieron esos grandes navegantes como lo fueron Juan Sebastián Elcano, Andrés de Urdaneta, Miguel López de Legazpi y muchos otros que no se alcanzan a nombrar.
La frase de Edward Rosset en su libro “Los Navegantes” nos muestra parte de ese mar: “La fuerte marejada que azotaba el litoral había obligado a todos los barcos a refugiarse en puerto. Las olas de un enfurecido Cantábrico rompían con un estruendo en las rocas, levantando blancas cortinas de espuma de mas de cinco metros de altura. El recio y frio viento norte aullaba al chocar con los acantilados y rociaba las casas de los marineros con miles de diminutas gotas blancas de salitre. Entre la bruma se distinguía el fuerte San Antón, construido en la cima del saliente rocoso que, en forma de gigantesco ratón, protegía el puerto de Guetaria de las temibles borrascas del golfo de Vizcaya”.
Es importante mencionar la ciudad portuaria la Coruña (en gallego y oficialmente, A Coruña) la cual es una provincia española situada en el extremo noroeste de la península ibérica, que forma parte de la comunidad autónoma de Galicia. Su capital es la ciudad de La Coruña. Es la provincia más poblada de la comunidad.
Es conocida por su faro romano, la Torre de Hércules, que tiene vistas panorámicas de la costa. En la antigua ciudad medieval está la Plaza de María Pita, con arcadas y rodeada de estrechos pasajes peatonales.
Igual si leyeron que cuando salió Magallanes y su Flota para las Molucas en 1519, la Casa de Contratación de Sevilla, manejó la expedición en cuanto a toda la logística que implicaba dicha tarea; por el contrario, y a partir de 1525, la Corona resolvió que Sevilla solo se encargaría de las Antillas y nace la Casa de Contratación de la Coruña, la cual se encargará de las operaciones en las Molucas y empieza con la Expedición “García-Elcano”.
Continuará el 7 de octubre...
