Sin duda alguna en Inglaterra David Beckham marcó una era. El “niño dorado”, como es conocido, generó una locura total alrededor del fútbol. Entre los hombres por su potente pegada y su gran dominio de la pelota parada y en el género femenino por su apariencia física. El rugby uno de los deportes que día a día tiene más adeptos alrededor del mundo también existe un hombre bastante comparable con el futbolista inglés.
Jonny Wilkinson, también inglés, ha sido la imagen de una gran cantidad de reconocidas marcas en diferentes partes del mundo. Incluso en una ocasión aparecieron en una misma publicidad Beckham y Wilkinson en 2003. En ese mismo año Jonny fue el encargado de llevar a su equipo al título de la Copa Mundial en Australia. Él fue el que anotó el gol de la victoria en extra tiempo y esto fue el hecho determinante para que Max Clifford uno de los publicistas más famosos del Reino Unido lo bautizara como el “niño dorado del rugby” y hasta le pronóstico una vida de fama y fortuna.
La fama y la fortuna nunca aparecieron, una serie de lesiones durante cinco años dañaron el progreso en la carrera del inglés. Pese a ello hizo parte de su selección en la Copa Mundo de 2007. Al mismo tiempo Beckham viajaba a Los Ángeles para terminar su carrera futbolística y terminar de construir su gran imperio monetario.
Por las lesiones Wilkinson dejó su equipo y se trasladó a Toulon, un elenco de menor calidad comparado con el que jugaba en su natal Newcastle. A su llegado su equipo alcanzó la final del Europa Challenge Cup que es comparable con la Europa league en el fútbol. Luego logró la clasificación a la Heineken Cup, ésta es como la Champions League.
El rugby es un deporte en el que los atletas nunca pierden la fe y el deseo de ganar. Siempre bajo los parámetros y los valores que hacen tan especial a esta disciplina deportiva. El rugby no sólo es un deporte, es un juego, es una filosofía y un estilo de vida, combinando el sacrificio personal y el trabajo en grupo, para lograr un objetivo común. El ser un rugbier significa un estado mental.
La filosofía de este juego es lo más importante porque pese a la disputa y a la fuerza que se interpone contra el contrario, sabemos que si nuestro oponente no existiera no podríamos jugar. Hay una hermandad muy grande, hay una camaradería que se impulsa desde los valores del juego y eso hace que la disciplina crezca de la manera en que está creciendo en este momento.
Con información de: www.theweek.co.uk
Por las lesiones Wilkinson dejó su equipo y se trasladó a Toulon, un elenco de menor calidad comparado con el que jugaba en su natal Newcastle. A su llegado su equipo alcanzó la final del Europa Challenge Cup que es comparable con la Europa league en el fútbol. Luego logró la clasificación a la Heineken Cup, ésta es como la Champions League.
El rugby es un deporte en el que los atletas nunca pierden la fe y el deseo de ganar. Siempre bajo los parámetros y los valores que hacen tan especial a esta disciplina deportiva. El rugby no sólo es un deporte, es un juego, es una filosofía y un estilo de vida, combinando el sacrificio personal y el trabajo en grupo, para lograr un objetivo común. El ser un rugbier significa un estado mental.
La filosofía de este juego es lo más importante porque pese a la disputa y a la fuerza que se interpone contra el contrario, sabemos que si nuestro oponente no existiera no podríamos jugar. Hay una hermandad muy grande, hay una camaradería que se impulsa desde los valores del juego y eso hace que la disciplina crezca de la manera en que está creciendo en este momento.
Con información de: www.theweek.co.uk 
