Por medio de un proyecto que será presentado ante el Congreso de la República, el Gobierno Nacional busca que se apruebe un protocolo para mitigar la contaminación procedente de fuentes y actividades terrestres y mantener la calidad de las aguas para la salud de los ecosistemas y la biodiversidad en el mar Caribe.
Desde el Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible, manifestaron que proteger los recursos marítimos, ayuda a contribuir al crecimiento económico, ya que se desarrollarán actividades productivas y económicas, dirigidas principalmente a las poblaciones costeras.
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Asimismo, manifestó que los agentes de contaminación de estos ambientes es una problemática global que trasciende las fronteras de países y afecta particularmente a la Región del Gran Caribe, entre los que se encuentran materia orgánica, detergentes, sólidos, nutrientes inorgánicos y microorganismos de origen fecal, por eso es necesario tomar medidas al respecto.
Con esta medida se contribuye al “Protocolo Relativo a la Contaminación Procedente de Fuentes y Actividades Terrestres” que fue adoptado en 1999 y que entró en vigor el 13 de agosto de 2010.
“El impacto de la contaminación sobre los ecosistemas marinos es más evidente a lo largo de la zona costera, en donde se puede establecer un vínculo directo con las actividades humanas que ocurren en estas áreas. A esto se suma un problema más compleja que es el de las fuentes terrestres de contaminación que pueden estar ubicadas a distancias considerables del mar”, explicó Andrea Ramírez Martínez, directora de Asuntos Marinos, Costeros y Recursos Acuáticos del Ministerio de Ambiente.
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Con esta medida, además de proteger el medio ambiente marino, también se busca cuidar la salud humana de las actividades terrestres puntuales y no puntuales que lo contaminan.
“Es el primer acuerdo ambiental regional donde se establecen límites de efluentes y otras obligaciones específicas para fuentes listadas de contaminación, a la vez que se establecen calendarios para su cumplimiento por las partes de manera progresiva”, explicó Ramírez.
Es de anotar que, las cuencas que desembocan a la costa Caribe de Colombia representan el 33 % del país.
