El terremoto que azotó principalmente a la ciudad de Esmirna al occidente del país, el pasado viernes 30 de octubre, ha registrado más de 196 réplicas. Esta situación resulta complicada porque las edificaciones que están afectadas, se pueden derribar por el siguiente movimiento telúrico. La colombiana Alejandra Pastor quien lleva seis años en Turquía y actualmente es profesora de español en una entidad privada, escribió esta crónica para Kienyke.com
Esmirna es una ciudad en Turquía, también llamada “la Perla del Egeo”. Tiene más de 4.000 años de historia y asentamientos que datan desde el año 1.500 antes de Cristo. Esta zona registra hechos importantes que se remontan al Imperio Persa, Romano y ocupaciones griegas. Es una ciudad con mucho legado histórico y cultural.
La zona guarda verdaderos tesoros históricos, por ejemplo al norte de Esmirna están algunas ruinas romanas en Ephesus, el templo de Artemis, y la última casa de la Virgen María la cual fue su última parada registrada después de la crucifixión de Jesús, Juan la acompañó en su travesía.
Esmirna es una ciudad con una ubicación geográfica privilegiada y es el segundo mayor puerto de Turquía después de Estambul y es la tercera ciudad más grande, después de Estambul y Ánkara. Está localizada sobre el mar Egeo, entre las penínsulas de Foça y Klazomenai, es a unos 450 km al suroeste de Estambul.
- Lea también: Cinco conclusiones clave que deja la guerra entre Azerbaiyán y Armenia
- Le puede interesar: Se eleva a 12 el número de muertos tras terremoto en la región turca del Egeo
Dentro de Esmirna existen monumentos de interés turístico está el Reloj de Konak, el Bazar de Kemeralti “Kemeraltı Çarşısı”. Es una ciudad que está en constante crecimiento en economía e infraestructura. Es una cultura amigable y tiene mucho orgullo por el legado que le aporta la historia.
El terremoto del viernes 30 de octubre a las 2:51 p.m, se inició a 17 km de la costa de Seferihisar. El gobernador de Esmirna Yavuz Selim Kosger, dijo que el terremoto provocó un tsunami parcial en el distrito costero de Seferihisar, que dejó al menos una persona herida.
Este movimiento se sintió hasta la ciudad de Esmirna y duró alrededor de 15 segundos, a la fecha de hoy se registran 28 personas muertas y más de 880 heridos. Algunas provincias cercanas a Esmirna como Manisa, en Balikesir y en Aydin también se reportaron afectaciones.
Reacción del gobierno
El presidente Recep Tayyip Erdoğan expresó su apoyo a la ciudadanía y también dio las gracias a los países que se han solidarizado con la situación en Esmirna.
El Ministro de Salud Fahrettin Koca ha dado órdenes y protocolos de atención al ciudadano, y también publicado en Twitter los números de servicio al ciudadano.
El ministro de Educación también se pronunció expresando apoyo a la comunidad y cerró colegios durante la próxima semana en Esmirna únicamente.
Mi experiencia en esta situación vivida en otros momentos en Colombia es conocida, a pesar de estar en otro país la sensación es la misma, la región andina también ha presentado movimiento tectónico, creo que la mayor diferencia es la cultura ciudadana porque es solidaria, en las redes sociales se publica dónde se puede dar apoyo a las víctimas dando información de cómo y dónde se puede ir a ayudar.
Durante el movimiento telúrico, los dueños de las tiendas invitaron a salir al parque y que se alejaran de los edificios, dando mensajes para mantener la calma y no entrar en pánico. Así mismo insistían en que era necesario esperar a la siguiente réplica para prevenir desastres.
Como es costumbre en Turquía, muchos aprovecharon el momento para disfrutar el té o çay en la calle y hacer “mangal” (asados) y compartir el momento dándose apoyo mutuo.
Lamentablemente se le suma la pandemia, en donde las autoridades han sido insistentes en el uso del tapabocas. Sin embargo la campaña del gobierno para mantener el aseo personal, usar desinfectante y el distanciamiento social, ha sido constante.
Debo decir que soy afortunada porque mi barrio no se vio tan afectado como otros, en donde los edificios se desplomaron en cuestión de segundos, y las personas quedaron atrapadas.
Son las 7:30 de la noche 31 de octubre y la Embajada de Colombia en Turquía no se ha pronunciado y tampoco ha enviado comunicado oficial por vía correo electrónico preguntado por el estado de los connacionales.
Mi nombre es Alejandra Pastor y llevo viviendo 6 años en Turquía. Actualmente, soy profesora de español en una entidad privada, en esta Ciudad de la Perla.