Siete de los delincuentes colombianos más buscados en el mundo entero por los delitos de secuestro, narcotráfico y lavado de activos fueron capturados por Interpol Colombia tras haber regresado al país con la ilusión de escapar de las autoridades, una estrategia muy usada por los criminales, quienes después de delinquir en el exterior regresan a su país natal en busca de refugio, según Jorge Luis Vargas, director de la Dijín.
El pasado 17 de mayo fue capturado Adriano Castellanos Pedraza, acusado de lavado de activos en Ecuador y de ser fundador de las empresas fantasmas registradas en Estados Unidos, Prospermundo y Escastell, utilizadas para realizar millonarias transferencias, el dinero era sacado de programas sociales en Venezuela y enviado a la Florida. Aproximadamente 60 empresas venezolanas y 40 ecuatorianas se vieron involucradas en falsas exportaciones.
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La empresa Escastell pertenecía a Adriano Castellanos Pedraza y al ecuatoriano Byron Espinosa Barreiros, mientras que en Prospermundo, era también de Castellanos, pero en esta ocasión, la esposa de Espinosa, Rosalin Mogollón Almeida era su socia principal.
Por otro lado, Carlos Andrés Ibarra Romero, conocido como el ‘Pacificador’ fue arrestado en Antioquia, luego de ser perseguido por las autoridades bolivianas desde el año 2011, por secuestrar a una menor de edad y pidiera por el rescate 300 mil dólares.
Otros capturados, según recoge El Tiempo, son los acusados de narcotráfico: Carlos Andrés Martínez Bedoya, Robbin Lozano Padilla y Fray Mauricio Bravo Plazas que exportaba cocaína a Holanda.
También cayeron Pablo José Giraldo, apodado como el ‘Químico’ y acusado de procesar la cocaína a un estado líquido para posteriormente impregnarla en el carbón, fue arrestado en el Quindio. Y por último, Héctor Fernando Muñoz , capturado en Jericó, Antioquia, quien hacía el mismo procedimiento y enviaba la droga a Europa.
