Los animales no conocen de especies, pero de lo que sí saben es de amor incondicional. Un ejemplo de esto fue lo que ocurrió en Cartagena con una perrita criolla que acogió a un mono capuchino recién nacido y abandonado. Desde ese momento se comportan como madre e hijo y no hay quien los separe.
La perrita que no tiene nombre porque deambula por las calles, había tenido sus crías hace poco tiempo cuando encontró al que sería su hijo adoptivo. No dudó en amamantarlo como otro de sus cachorros. Al percatarse de la situación, las autoridades trataron de separarlos pero ocurrió algo inusual.
[single-related post_id="815002"]
El jefe de grupo de protección animal y turismo en Cartagena de la Policía, comandante Carlos Sánchez, explicó que cuando tratan de separarlos cada animal llora, y aunque ya varias personas han intentado hacerlo, fracasan. Y no solo porque los animales sean inseparables sino porque el mono se torna agresivo.
Sánchez explicó que el hábitat del capuchino no debería ser el urbano ya que esta especie vive en una gran variedad de bosques húmedos y secos. Es por esto que luego de que la Policía ambiental de Cartagena les realizara chequeos veterinarios decidieron trasladarlos a una finca en la que podrán estar juntos sin que las especies, silvestres y domésticas se vean afectada.
Otro caso en la que una perrita 'adoptó' a un mono se presentó en Malasia. Un conductor captó la escena en la que se ve al capuchino en el lomo del animal en la carretera. Según el conductor, la madre del mono habría fallecido y la perrita lo acogió.
https://youtu.be/OzKa3Y56KgA
Otro caso se presentó en la India, una perrita de raza pomerania decidió adoptar a un pequeño mono, a diferencia de las otras madres adoptivas y sus crías, este mono se colgaba del pelaje de la parte posterior del animal.
https://youtu.be/QKSMxdsw_ZU
