Este lunes se vive una importante jornada política en el país. Se trata de la fecha límite para que los partidos políticos inscriban su listado de candidatos para el Congreso de la República.
Cada uno de los partidos tienen dos opciones para inscribir estas listas: de manera abierta o cerrada. Estos dos mecanismos tienen sus ventajas y desventajas, pero el objetivo es el mismo: hacer que más candidatos de una colectividad ocupen las anheladas curules.
Son solo 102 puestos en el Senado de la República y 166 en la Cámara de Representantes para cientos de candidatos que cada cuatro años buscan llegar al Congreso. Solo para Senado en 2014 se presentaron 733.
En las listas cerradas los candidatos se ubican en orden descendente. Quien esté más cerca de la cabeza de la lista tiene más posibilidades de ser elegido, ya que los votos llegan es al partido y no a una persona en particular. Una vez alcanzado el umbral del primero del listado, los siguientes votos son para el segundo, y así sucesivamente.
[single-related post_id="795182"]
Con este modelo se permite una mejor identidad de partido, y los electores votan por una idea colectiva. También se dan los casos en los que una figura representativa se vuelve en el impulso para el resto, como sucedió en el 2014 con el Centro Democrático, cuya cabeza al Senado era el expresidente Álvaro Uribe.
Pero las listas cerradas también representan algunas dificultades. En ocasiones los ciudadanos no conocen los candidatos presentados por el partido, generando desconfianza. También hay casos en los que existen disputas internas, y en ocasiones desleales, para quedar más arriba en los renglones.
Hasta el 2003 este era el método obligatorio para presentar listas, hasta que fue introducida la llamada "lista preferente" o "lista abierta", impulsada por el entonces Ministro del Interior, Fernando Londoño.
Para estas elecciones practicamente todos los partidos irán por lista abierta, lo que significa que los ciudadanos podrán elegir al candidato de su preferencia. De esta forma, no interesa si el aspirante tiene el número 1 o el 53, porque puede recibir para sí mismo.
Las listas abiertas permiten que los votantes elijan al candidato que realmente los representa, y no someterse a la decisión de un partido. Pese a esto, no es la opción perfecta.
Con este método no solo se compiten con otras colectividades sino con su mismo partido, aumentando los costos de campaña. Otro problema es que no promueve la unidad ideológica.
¿Qué son listas abiertas y listas cerradas al Congreso?
Lun, 11/12/2017 - 08:19
Este lunes se vive una importante jornada política en el país. Se trata de la fecha límite para que los partidos políticos inscriban su listado de candidatos para el Congreso de la República.