Los niños y jóvenes de esta generación han conocido al narcotraficante Pablo Escobar a raíz de la telenovela del Canal Caracol, muchos lo admiran, e incluso, quieren ser como él. Aprovechando el éxito que ha tenido Escobar, el patrón del mal, una editorial antioqueña imprimió álbumes con los personajes de la serie y los reales.
En la portada, y sobre un papel de baja calidad, aparece una fotografía de los años ochenta de Pablo Escobar sonriendo. El cuadernillo tiene 16 páginas para llenar con láminas de sus propiedades, automóviles, sicarios, los animales de la Hacienda Nápoles y hasta las mujeres con las que sostuvo alguna relación. El álbum cuesta 2 mil pesos y los sobres de láminas se compran por 100 pesos. Los que logren llenarlo ganarán premios como mp3, Ipod, USB o balones de fútbol.
El álbum de Pablo Escobar está generando preocupación entre los sociólogos y sicólogos, pues consideran que la imagen del narcotraficante, después de casi 20 años de su muerte, se está desdibujando en la mente de los jóvenes y creando un imaginario equivocado.
