Cuando hacía unos arreglos en una iglesia en 2008, Dallas C. Wiens tocó con su cabeza un cable de alta tensión. Ante la descarga eléctrica las facciones del rostro se le derritieron y su cabeza quedó totalmente carbonizada. Los médicos que lo vieron, y que aún hoy no saben cómo pudo sobrevivir, trataron de recuperar parte del rostro pero fue imposible, hasta los globos oculares estaban cubiertos de piel. La nariz se le había borrado. Después viviendo sin un rostro, fue intervenido quirúrgicamente para una reconstrucción facial completa gracias al Departamento de Defensa, que aportó 300.000 dólares para la cirugía. Wiens recuperó los labios, tiene barba, ya tiene nariz y dice que recobró el sentido del olfato. Aunque tiene ojos, aún no ha podido recuperar la visión.
El hombre que no tenía cara
Sáb, 10/12/2011 - 14:30
Cuando hacía unos arreglos en una iglesia en 2008, Dallas C. Wiens tocó con su cabeza un cable de alta tensión. Ante la descarga eléctrica las facciones del rostro se le derritieron y su cabeza qu