Durante los días de reflexión es probable que los ciudadanos aprovechen su tiempo para desconectarse de la rutina y hacer actividades que no pueden hacer a menudo.
Una gran cantidad de sujetos deciden dedicarse a tomar bebidas alcohólicas día tras día. Sin embargo, este hecho representa un riesgo para la salud y más cuando se toma como una adicción.
Cuando no es así, el cuerpo se enfrenta a una ingesta de alcohol lo cual conlleva a la inhibición de la persona perdiendo el juicio y volviendo lento el sistema motor, pues se pierde velocidad en el habla, hay problemas de equilibrio y las reacciones son nulas o despaciosas.
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Además, las personas que consumen alcohol sin moderación están dañando su sistema nervioso. Lo que hace esta sustancia dentro del organismo es cambiar la estructura de las neuronas.
Lo anterior representa un riesgo debido a que hay un cambio importante en el cuerpo pues, los reflejos se vuelven lentos, la visión pasa a ser borrosa, la coordinación es nula y hay episodios de pérdida de la memoria.
Por otra parte, es común ver que las que están consumiendo alcohol se ponen rojas. Esto es un efecto del organismo porque se aumenta la actividad cardíaca aumentando la temperatura del cuerpo.
Después de un largo periodo ingiriendo alcohol, el organismo está agotado y necesita recomponerse. Este lapso es reconocido como ‘guayabo’, pero para la comunidad científica esto es una molestia pasajera.
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Este episodio se presenta por las modificaciones a nivel metabólico que se da por la ingesta de alcohol. Al igual, se puede decir que es un mecanismo de defensa ante la segregación elevada de ciertas sustancias químicas del cuerpo.
Hay estudios que demuestran que consumir aguardiente o whisky es mejor que el vino o la cerveza porque da menos síntomas al día después. Por esto, hay varios productos en el mercado que sirven para solucionar estos problemas.
Debido a lo anterior, se sugiere una ingesta moderada de licor durante los días festivos para no tener molestias de salud en las fechas de descanso.
