Para nadie es un secreto que tener una cita puede ser algo peligroso o complicado, nunca se sabe con quien se va a topar, sin llevarlo a lo extremista, sencillamente, cabe la posibilidad de que conozca alguien que sencillamente no cumple con sus expectativas o intereses. Asimismo, puede que usted no cumpla con los requisitos de la otra persona.
A pesar de que no es necesario que cuente cada uno de sus secretos y detalles sucios de su personalidad, hay ciertas cosas de las que usted debe hablar, de esta manera, el otro puede hacerse una idea más clara de quién es usted y establecer expectativas más realistas, por ejemplo, saber si habrá una segunda cita. Esto es de lo que debe hablar en ese momento:
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Como siempre se aconseja, sea transparente en sus intenciones, sin importar cuáles sean, es mejor ser honesto, no tener cierta táctica para luego conseguir su objetivo, para ser más exactos, no tiene nada de malo buscar sexo casual, mientras que la otra persona lo tenga claro y no piense que haya oportunidad de algo serio. Tampoco es que sea necesario decidir cuándo se quiere casar y cuántos hijos quiere tener, solo mantenga todo muy simple y claro.
En tiempos como los que se viven actualmente, a pesar de que existe esa frase de "no hablar ni de política o religión en eventos sociales" en un contexto como este es lo mejor. Por lo que resulta práctico confesar por quién votó en las últimas elecciones. Si la otra persona es provida o está en contra de la legalización de la marihuana es mejor saberlo antes de hacerse ilusiones.
Otra cosa por saber en la primera cita, o incluso antes de tenerla, es decir si es padre en caso de serlo, no espere hasta que llegue el momento de invitarle a su casa y vea los juguetes tirados en el piso, o incluso al niño preguntándole por su mamá.
De la misma manera, hablar sobre si se tiene mascotas, por el bien de los dos, parece algo oportuno por decir, ¿por qué? Sencillo, hay personas que sufren de terribles alergias a los perros, gatos u otros animales, por lo que antes de ponerse a decidir si prefiere seguir alargando esa historia de amor o sus compañeros de cuatro patas, es mejor hablar de este tema desde el principio.
Tampoco espere a estar un mes saliendo para confesar que prefiere las relaciones abiertas, o peor aún, si se está en una en el momento. Es decir, no tiene nada de malo ver el amor o las relaciones de una manera no monógama, pero no todas las personas se sienten atraídas a compartir su pareja, sea solo de manera sexual o romántica.
Si está por venir algo muy importante en su vida, háblelo en la primera cita, por ejemplo, si próximamente se va a mudar o va a cambiar de trabajo, esto hace más fácil la situación.
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Religión: otro tema importante para hablar, aunque crea o no, es algo que define la vida de muchas personas, tal vez las personas ateas no les importe celebrar una navidad o janucá, pero para los creyentes sí es muy importante, tarde o temprano habrá que hablar de ello.
A pesar de que no es algo tan drástico pero si es algo práctico para conocer, las opciones de dietas alimenticias o estado de sobriedad deben saberse, es cómodo para la otra persona entender que usted es vegetariano para que así no le invite a un sitio de carne a la parrilla, o en caso de invitarle a tomarse unos cócteles, saber que usted lleva un año sobrio.
