La recordada estafa nigeriana fue una estrategia utilizada por una banda de estafadores algunos años atrás. Los delincuentes enviaban a sus posibles víctimas, correos electrónicos de manera masiva, en donde contaban la historia de una persona muy cercana a ellos, que tenía supuestamente una enfermedad terminal, razón por la cual estaban buscando a quien dejar su fortuna.
ESET, la compañía líder en detección proactiva de amenazas, analizó recientemente un intento de fraude hacia un usuario, quien recibió en primer lugar, un mensaje desde un número desconocido a través de Telegram, la aplicación de mensajería instantánea, con la misma modalidad de estafa. Aunque los detalles pueden variar, la intención y el relato de los delincuentes es el mismo.
Es importante mencionar, que específicamente en esta situación, las personas que intentaban realizar el fraude, también se comunicaron con el usuario a través de una videollamada que duró pocos segundos. Lo anterior con el fin de mostrar a la supuesta persona enferma y hacer creer que se trata de una condición real.
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En el mensaje, los encargados del engaño comparten el número de un supuesto abogado, para que en dado caso de que se acepte el dinero, se contacten vía WhatsApp y se coordine el envío de este.
Según la compañía de detección, una vez se realizan los pasos para la aparente entrega de esta herencia, el supuesto abogado pide una serie de datos personales, que van desde el nombre completo, hasta una fotocopia del documento de identidad de la persona que recibirá el monto.
ESET explica que una vez los estafadores obtengan la confianza de sus víctimas, el paso siguiente es solicitar a los supuestos receptores de la fortuna, el pago de unos impuestos para que el dinero pueda llegar hasta su cuenta.
En España esta modalidad de robo surgió desde el año 2020 durante la pandemia, mientras los delincuentes se aprovechaban de las muertes que se reportaban con frecuencia en esta zona del mundo como consecuencia del covid-19.
En julio del 2022 la Policía Nacional y la INTERPOL reportó a una organización criminal dedicada única y exclusivamente a la estafa nigeriana a nivel internacional. En esa oportunidad, las autoridades capturaron a 80 personas involucradas con la banda e incautaron más de 500 mil dólares y 30 mil euros. Según los reportes, esta organización logró estafar a miles de ciudadanos, en especial a los adultos mayores.
Como dato adicional, la INTERPOL también logró desmantelar una banda en Sudáfrica denominada Black Axe, un grupo criminal internacional dedicado de igual forma, a las estafas online.
