El pasado 14 de diciembre, se presentó un presunto caso de homofobia que ha conmocionado a miles de usuarios. Se trata del supuesto asesinato de Felipe Garzón Barreto, un hombre que fue encontrado muerto en su apartamento, ubicado en el centro de la capital, amarrado y amordazado con una bandera LGBTI.
KienyKe.com obtuvo información en exclusiva por parte de Laura Daniela Díaz, de una de las amigas más cercanas a la víctima, quien asegura que el fallecimiento de Garzón se trató de un asesinato por homofobia y no de un hurto ni de un ajuste de cuentas.
Según narró la testigo, el hombre residía en un apartamento en el barrio Las Nieves, en la localidad de Santa Fe. El día de su muerte, su pareja, Henry Johan Aguilar, se contactó con él para concretar algunos asuntos pendientes con respecto a la nueva residencia donde se mudarían y para ir a cenar. Esa fue la última vez que hablaron.
Tal como habían acordado, Aguilar llegó al apartamento de su novio al rededor de las 8:50 de la noche. Sin embargo, al llegar al lugar nadie abrió la puerta. El hombre timbró en repetidas ocasiones, ya que se escuchaba música dentro del inmueble, pero, al ver que nadie atendía al llamado, decidió retirarse después de un tiempo.
De acuerdo con los testimonios, Aguilar pensaba que su pareja se encontraba dentro de su hogar pero no quiso abrir la puerta. No obstante, Garzón permaneció incomunicado por varias horas e incluso días, lo que alertó a sus familiares. Ante la angustia, decidieron ir nuevamente al apartamento para averiguar qué estaba pasando.
Cuando llegaron a la residencia, se percataron de que la música seguía encendida, por lo que decidieron llamar a un cerrajero para abrir forzadamente la puerta. Al entrar al lugar, se toparon con una desgarradora escena: la víctima estaba muerto, tendido en el suelo boca abajo, amarrado de manos y pies, desnudo y amordazado con una bandera LGBTIQ.
Tal como registraron las cámaras de seguridad del edificio, dos hombres entraron al inmueble de Garzón al rededor de las 6 de la tarde del 12 de diciembre. Los sujetos ingresaron a la portería del edificio, donde la víctima los recibió con un saludo de mano, y posteriormente los hizo seguir.
Los testigos especulan que Garzón conoció a los dos presuntos victimarios a través de la plataforma de citas Grindr, aunque no eran muy allegados. Esto se debe a que la víctima solía saludar a las personas cercanas con un abrazo o un beso en la mejilla, por lo que creen que llevaban poco tiempo de conocerse.
Por el momento, la familia y allegados esperan que las autoridades y la aplicación de citas les brinden una respuesta sobre lo ocurrido, ya que aseguran que se trató completamente de un caso de intolerancia por la orientación sexual de la víctima. Se espera que inicien las respectivas investigaciones para dar con el paradero de los responsables.