
La educación en Colombia sufrió al menos 52 ataques en la primera mitad de año, incluidos ocupaciones militares o reclutamientos forzados de estudiantes, denunció la organización Consejo Noruego de Refugiados (NRC), que pide esfuerzos al Estado y la comunidad internacional para revertir esta tendencia.
Estos ataques, uno cada tres días, afectaron a más de 9.500 estudiantes, profesores y otros trabajadores docentes, y suponen un aumento del 65 % con respecto a los denunciados en el mismo periodo de 2024, indicó un informe de NRC publicado este jueves.
Se registraron en los departamentos de Antioquia, Cauca, Chocó, Norte de Santander, Putumayo y Valle del Cauca, en los que tiene presencia esta ONG fundada por el antiguo coordinador humanitario de la ONU Jan Egeland.
"Múltiples amenazas continúan poniendo en riesgo la vida de niños, docentes y demás personal escolar", resumió NRC, que también contabilizó como ataques la colocación de minas antipersona próximas a colegios o enfrentamientos armados en las cercanías.
"Todas las partes, incluidas las fuerzas de seguridad del Estado, deben cumplir con su responsabilidad de respetar las instalaciones educativas y proteger a los niños de cualquier daño", señaló al conocerse el informe el responsable de NRC en Colombia, Giovanni Rizzo.
Según Rizzo, los actores armados "muestran cada vez menos respeto por las escuelas", aumentando los ataques en el interior de los recintos, ya que si éstos representaban un 50 % del total en la primera mitad de 2024 han supuesto un 61 % entre enero y julio de 2025.