Las polémicas no dejan de ser pan de cada día en la WWE y ahora está en tela de juicio los planes de alimentación y entrenamiento de las superestrellas de la empresa, de acuerdo a las recientes declaraciones del nutriólogo de Triple H y Stephanie McMahon, entre otros, Dave Palumbo.
En entrevistas a medios especializados, Palumbo comentó que la WWE tiene programas de salud y bienestar permiten que las superestrellas consuman hormonas de crecimientos como HGH y testosterona.
“Lo que tiene la lucha libre que no tienen otros deportes es que que al ser mas entretenimiento que una disciplina deportiva, se permite que los luchadores tomen reemplazos hormonales. Pueden tomar testosterona, HGH, y está totalmente permitido. Es más, muchísimos luchadores lo hacen”.
[single-related post_id="767878"]
La empresa más grande lucha libre salió al paso a estos comentarios y comunicó a los seguidores que solo los luchadores tienen permitido el uso de estos suplementos hasta un 7 % en su cuerpo de acuerdo a terapias de recuperación:"La WWE y su política de salud y bienestar tiene establecido claramente que las sustancias conocidas como HGH y HCG están en la larga lista de sustancias prohibidas".
Sin embargo, ya comienzan las críticas a los luchadores y con ello, la veracidad de su entrenamiento, resistencia y recuperación después de los combates.
Cabe recordar que la relación entre esteroides y luchadores viene desde 1990, cuando entes investigadores del departamento de justicia descubrieron e indicaron que Zahorian vendía estos elementos y medicinas a 37 luchadores de la empresa de Vince McMahon. Muchas medicinas carecían de receta médica.
McMahon no fue detenido ni judicializado por falta de pruebas, pero sí se empezaron a tomar medidas para evitar el uso de sustancias prohibidas y una competencia desleal.
Triple H no se ha pronunciado en redes sociales sobre este tipo de comentarios que podría generar especulaciones de cuerpos tan grandes y recuperaciones rápidas de lesiones o golpes sufridos en combates.
