Argentina, a un paso del abismo

Esta segunda cesación de pagos sería la segunda en menos de 13 años. Un Estado para funcionar, como cualquier otro, requiere de recursos. Estos se pueden obtener de muchas maneras. A través de la actividad económica o a través del sistema financiero. Argentina, como la mayoría de países del mundo, tiene una deuda externa con diferentes acreedores alrededor del mundo. Según el gobierno argentino, venía realizando pagos a sus distintos acreedores. Pero la justicia estadounidense suspendió estos pagos a los acreedores de Argentina. No avaló los acuerdos que había logrado la nación y por ende entró en default desde el miércoles,  el día máximo de plazo para que el Estado argentino se pusiera al día. Cristina Fernández de Kirchner arremetió contra Estados Unidos y la justicia de este país por el bloqueo al pago. Calificó de buitres a los fondos y no dio reconocimiento al default. La presidenta afirmó que impedir que alguien pague no es un default.  Argumenta que la justicia simplemente actuó a favor de los fondos NML Capital y Aurelius, sin tener muy en cuenta la posición de Argentina. Según los fondos, Argentina no consideró las alternativas de pago y prefirió la cesación de pagos. Estados Unidos ha insistido que Argentina debe normalizar la relación con sus acreedores para evitar una catástrofe financiera. Sin embargo, el Gobierno de Kirchner dice que no puede pagar el 100% de sus acreencias a sus distintos acreedores sin activa la clausula RUFO. Esto clausula permite equiparar los pagos a todos los acreedores. Esto le traería múltiples juicios de varios millones de dólares, lo que equivale a otro dolor de cabeza financiero. Algunos de los bancos más grandes de Estados Unidos, como JP Morgan, han sostenido reuniones con  los acreedores para solucionar el caso. La situación en Argentina, más la tensión en Rusia y Ucrania y el conflicto en Gaza, han generado desplomes en los principales mercados del mundo. La mayor preocupación del Gobierno es que este default tiene efectos en la creación de empleo. La presidenta Kirchner  ha dicho que no piensa firmar 'cualquier cosa' respecto a los acuerdos con los acreedores. Uno de los llamados que ha hecho el Gobierno es fortalecer el consumo interno. 'Compren una moto si pueden, una plancha o una lavadora porque así podemos fortalecer el trabajo de los argentinos", afirmó Kirchner. Otro de los efectos es la caída de la inversión extranjera. Esto afectaría principalmente  proyectos en minería e hidrocarburos. La búsqueda de recursos se podría ver frenada por la mala calificación que recibiría Argentina por parte de agencias económicas. Potenciales inversionistas no arriesgarían recursos luego del default. De igual manera, la nación gaucha  tendría puertas cerradas para buscar recursos en los bancos del mundo. Otra consecuencia  inmediata es el aumento de intereses de la deuda. De esta manera, los recursos que pueda encontrar Argentina tienen que ser lejanos de la jurisprudencia de Estados Unidos, así lo que logren encontrar no sea bloqueado. Sin embargo, Argentina está más cerca de ser reportado en el Datacrédito del mundo y su economía sufriría un colapso. [soundcloud id='161311937']