
La trágica muerte de B-King (Bayron Sánchez) ha desatado una ola de teorías en redes sociales, muchas de ellas cargadas de especulación y acusaciones sin pruebas. Entre las más polémicas se encuentra aquella que vincula a su exesposa, Marcela Reyes, como posible responsable de su desaparición y posterior asesinato. Sin embargo, tanto las autoridades mexicanas como la familia del artista han pedido que no se saque conclusiones apresuradas.
El origen de estas sospechas se remonta a un video publicado por el propio cantante meses antes de su muerte, donde él advierte que si algo le pasaba, la responsabilidad recaería sobre su exesposa y la pareja de esta, quien, según él, estaría en prisión en ese momento. Esta declaración encendió las alarmas en redes, donde miles de usuarios comenzaron a especular sobre la posible implicación de ella en el caso.
Las tensiones entre B-King y Marcela Reyes se habían hecho públicas luego de la breve participación de la DJ en el reality ‘La casa de los famosos Colombia 2’, donde ella habló sobre una supuesta infidelidad de Sánchez con Karina García, conocida por su paso en el mismo reality. A partir de ese momento, se desató una guerra de declaraciones entre la expareja, llegando incluso a acusarse mutuamente de realizar actos de brujería.
Familia de B-King rechaza ataques contra Marcela Reyes
En medio del revuelo mediático, Stefania Agudelo, hermana del fallecido artista, rompió el silencio en una entrevista con el programa internacional ‘We Love Entretenimiento’, donde pidió no juzgar a Marcela Reyes sin pruebas y dejar que las autoridades hagan su trabajo.
"Eso hay que dejárselo a las autoridades, eso no me compete a mí. Yo con Marcela no tengo comunicación alguna, la respeté, fue la pareja de mi hermano durante siete años, pero no sabría qué decirte", expresó Agudelo.
También confesó que en los primeros días tras la muerte de B-King sintió rabia y buscaba un culpable, pero con el tiempo comprendió que esa actitud no cambiaría nada. En su lugar, optó por dejar el proceso en manos de la justicia.
A pesar de la presión pública, las autoridades encargadas del caso han sido claras: no existen pruebas que vinculen a Marcela Reyes ni a su pareja actual con el crimen. El asesinato de B-King sigue siendo investigado como un hecho aislado, y cualquier teoría que no esté sustentada en pruebas podría entorpecer la investigación.