
Después de más de tres décadas manteniendo unida a la familia más caótica de la televisión, Marge Simpson se ha despedido. La madre abnegada, de voz suave y eterno peinado azul, fallece en el impactante final de la temporada 36 de Los Simpson, sorprendiendo a millones de fans en todo el mundo.
El episodio, titulado Stranger Things, comienza con un simple conflicto entre Bart y Lisa, quienes dejan de ver su caricatura favorita juntos. Pero lo que inicia como una historia cotidiana da un giro inesperado: un salto de 35 años hacia el futuro revela un panorama muy diferente para la familia Simpson. Lisa es ahora comisionada de la NBA; Bart dirige un asilo ilegal en el que vive Homero. Y es en ese contexto donde llega el golpe emocional: Marge ha muerto.
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En una escena breve, pero devastadora, Homero aparece llorando frente a la tumba de su esposa, acompañado por sus hijos. La animación, aunque sencilla, logra transmitir todo el peso de una pérdida que sacude incluso al espectador.
La reacción no se hizo esperar. Redes sociales, especialmente en México, se llenaron de memes, mensajes nostálgicos y homenajes a Marge. Canales de YouTube y creadores de contenido han analizado cada detalle del episodio, tratando de encontrar pistas sobre el rumbo que tomará la serie a partir de ahora. Mientras algunos espectadores señalan que Los Simpson han perdido su esencia contracultural, otros reconocen que la serie todavía conserva la capacidad de conmover y sorprender.
Marge no fue solo la esposa de Homero o la madre de Bart, Lisa y Maggie. Fue el pilar moral de la serie, una mujer que a pesar del caos, siempre supo poner orden, amar incondicionalmente y resistir las locuras de su familia. Su partida marca el cierre de una era.
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Ya sea como símbolo de paciencia infinita o como uno de los personajes más humanos en la historia de la animación, Marge Simpson deja un vacío difícil de llenar. Porque si algo nos enseñó durante 36 temporadas, es que el verdadero amor, incluso en Springfield, se vive con dulzura, firmeza… y a veces, con un suspiro profundo.