
Aunque el Gobierno Nacional avanza en la redacción del decreto que convocaría a una consulta popular para sacar adelante la reforma laboral, el ministro del Interior, Armando Benedetti, dejó abierta la posibilidad de que esta iniciativa no se concrete, dependiendo de lo que ocurra en el Congreso.
En entrevista con el medio W Radio, Benedetti afirmó que si el Senado aprueba el proyecto tal como viene de la Cámara de Representantes —con algunos ajustes menores— podría no ser necesario acudir a las urnas.
“Si en el Senado se aprueba lo que viene aprobado de la Cámara de Representantes, uno podría pensar que no sería necesaria la consulta”, explicó el ministro, señalando que el texto legislativo ya cuenta con cerca del 80 % del articulado de la reforma impulsada por el Gobierno.
El ministro también se refirió a las motivaciones detrás del decreto, asegurando que responde a presuntos vicios en la votación del pasado 14 de mayo. “El decreto está motivado por los seis vicios que hubo: fraude, trampa. Además, lo remite a la Corte Constitucional para que vaya directamente”, sostuvo.
No obstante, insistió en que si el Senado elimina aspectos polémicos como la posibilidad de contratar por horas y se mantienen los puntos centrales de la reforma laboral, el Ejecutivo podría considerar desistir de la consulta. “En ese futuro hipotético, uno podría pensar que no se necesita la consulta”, reiteró.
Esta postura llega en un momento de alta tensión política, luego de que ocho partidos —entre ellos Cambio Radical, Centro Democrático, Liberal, Conservador y el Partido de la U— advirtieran que una consulta convocada por decreto sería un “golpe de Estado”. Benedetti ha rechazado estas acusaciones, calificándolas de “dramáticas y baratas”.
Por ahora, el decreto sigue en preparación, pero su publicación dependerá del curso legislativo en el Senado. El Gobierno mantiene su apuesta por avanzar en las reformas sociales, aunque ahora parece dispuesto a negociar una salida legislativa si hay voluntad política en el Congreso.