Los exministros Ricardo Bonilla (Hacienda) y Luis Fernando Velasco (Interior) no aceptaron los cargos que les imputó la Fiscalía General de la Nación por su presunta participación en el entramado de corrupción alrededor de la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD) y el Invías.
En audiencia ante la Sala Penal del Tribunal Superior de Bogotá, ambos exfuncionarios se declararon inocentes y anunciaron que defenderán su actuación en el Gobierno de Gustavo Petro frente a la tesis de la Fiscalía, que los señala como parte de una organización criminal para direccionar contratos y asegurar mayorías en el Congreso.
¿Cuál es la tesis de la Fiscalía?
De acuerdo con la imputación presentada por la fiscal novena delegada ante la Corte Suprema, entre mayo de 2023 y febrero de 2024 se habría configurado un acuerdo entre Bonilla, Velasco y otros funcionarios para asegurar apoyos parlamentarios a favor de proyectos del Gobierno Nacional.
Según la Fiscalía, en desarrollo de ese presunto “pacto criminal” se habrían ofrecido y acordado proyectos, contratos o convenios desde Invías y la UNGRD a algunos congresistas, a cambio de su concurrencia y voto en comisiones clave del Senado y la Cámara (Primera, Tercera, Cuarta y Séptima).
En total, la investigación habla de 74 proyectos radicados en Invías por alrededor de 571.700 millones de pesos y 5 proyectos en la UNGRD por cerca de 40.500 millones, para un monto agregado superior a 612.000 millones de pesos, de los cuales una parte se habría concretado. La Fiscalía les imputó a los exministros los delitos de concierto para delinquir agravado, interés indebido en la celebración de contratos y cohecho por dar u ofrecer.
La defensa de Bonilla
En la audiencia, el exministro Bonilla sostuvo que no acepta los cargos y cuestionó la base de la imputación. Afirmó que ha trabajado “más de medio siglo” en los sectores público y privado y que “nunca he tenido un peso de actividad ilícita”, insistiendo en que cumplió sus funciones como ministro de Hacienda “conforme a la Constitución y la ley”.
Bonilla aseguró que tiene “la certeza de no haber cometido ningún delito” y anunció que defenderá su inocencia “hasta las últimas consecuencias” junto con su equipo jurídico.
La posición de Velasco
Por su parte, el exministro del Interior, Luis Fernando Velasco, también rechazó la imputación y recalcó que “no acepto cargos, no tengo nada que negociar con la Fiscalía”. Señaló que, hasta ahora, en el proceso se ha escuchado principalmente a testigos interesados, que han reconocido delitos y buscado beneficios en la pena.
Velasco pidió que se contrasten esas declaraciones con sus propias versiones y pruebas, y sostuvo que, cuando sean conocidas, la percepción sobre su rol en el caso podría cambiar.
Lo que sigue en el macrocaso UNGRD
Con la no aceptación de cargos, el proceso entra en una fase de mayor confrontación jurídica entre la Fiscalía y las defensas de los exministros. En paralelo, siguen avanzando las líneas de investigación que involucran a exdirectivos de la UNGRD, como Olmedo López y Sneyder Pinilla, y a los congresistas que habrían recibido proyectos a cambio de apoyar reformas y operaciones de endeudamiento del Gobierno.
El caso se mantiene como uno de los procesos más relevantes sobre uso de recursos públicos y relaciones entre Ejecutivo y Congreso en este periodo de gobierno, con efectos políticos y judiciales que todavía están en desarrollo.
