Los candidatos en Colombia hacen de todo para conseguir votos, así sepan que no van a lograr ser elegidos. Ahí si, como dice el presidente Santos en sus declaraciones, “nunca antes”, hubo tanto político que quisiera ser presidente.
Para simpatizar con la gente, los candidatos se toman fotos en lugares a los que nunca volverán. Compartirán imágenes abrazando a una señora de la tercera edad, al bebé de brazos, a las minorías, un saludo para todos, aquí y allá, con el mismo guión de señalar que están al tanto de las problemáticas que los aqueja. Lo bueno es que en elecciones se muestran como son o la opinión pública los descubre.
En Mejor Hablemos, un programa de entrevistas que modera Claudia Palacios, Juan Carlos Pinzón, exministro de Defensa, exembajador en Washington y ahora candidato presidencial, confesó que votó NO en el plebiscito y que invitó a votar Sí porque el presidente se lo pidió.
Frente a estas declaraciones, Esteban Santos, el hijo menor del presidente le hace un comentario en Twitter y pone en duda la invitación de Pinzón a su candidatura. Es un ejemplo perfecto de “predicar, pero no aplicar”, de todo fue un engaño, y uno se pregunta qué le impidió a Pinzón seguir sus convicciones y no tener que convencer a la gente de algo a lo que no va asistir. Es como la persona que arma una fiesta, le dice a todo el mundo que allá se ven, pero no va. Sin embargo, en la política esto no es nuevo.
La filosofa Hannah Arendt brinda herramientas para entender por qué “la buena voluntad de hoy, no garantiza la buena voluntad de mañana”, en los asuntos públicos. Primero, amigo elector, Arendt señala que la política no es de buenas intenciones.
Segundo, los seres humanos cambiamos según las circunstancias, si no me cree pregúntele al presidente y a Pinzón. Y tercero, es que la política misma es la única que nos puede sacar de este callejón sin salida de manera milagrosa. Milagro que aún esperamos y seguiremos esperando.
Esto revela que Pinzón ha puesto en duda sus intenciones de ser presidente, la invitación que le hace a la gente para que lo apoyen, pierde un poco de credibilidad, hay un poco de inconsistencia a la hora de criticar el gobierno del cual hizo parte. Sus inclinaciones políticas, lo ponen más de centro derecha, y no de centro como dice ser.
No quiere decir que su preferencia sea mala, claro está. Todos tenemos el derecho a estar confundidos. Al final él mismo se da la razón “Si a uno lo vuelven meme... pues reírse, qué se le hace. Feliz noche.”
El meme de las elecciones
Jue, 01/02/2018 - 06:25
Los candidatos en Colombia hacen de todo para conseguir votos, así sepan que no van a lograr ser elegidos. Ahí si, como dice el presidente Santos en sus declaraciones, “nunca antes”, hubo tanto