En la historia de la humanidad han habido terribles experiencias donde se ha usado la santidad, el nombre de Dios (o de Alá, Krishna o cualquier otra deidad) y los distintos credos para diferentes causas, en las que la principal estrategia ha sido la exclusión de aquellos que piensen distinto o de quienes profesan otra fe. Desde la "Santa Inquisición", la "guerra santa", el holocausto nazi y hasta la segregación cultural y religiosa impuesta en algunos de los países árabes, son ejemplos claros de lo que las religiones y sus miembros le hacen a la humanidad y a todos aquellos que le son diferentes.
Todas las creencias, en sus escrituras profesan algo en común; el amor por el otro, pero al parecer su interpretación mas humana fuese "ama al otro, eso si, siempre y cuando, ese otro crea en lo mismo que tu", esto es mucho mas nefasto cuando esa fe es utilizada no solo como instrumento de adoctrinamiento espiritual sino como plataforma política.
En el ultimo año se ha visto un considerable incremento de la actividad política realizada por religiosos. Desde la famosa marcha de rechazo a las supuestas cartillas de género del Ministerio de Educación, promovidas principalmente por las iglesias cristianas y algunos radicales católicos.
Dicha marcha fue la plataforma perfecta para el lanzamiento publico de personajes como los tristemente celebres pastores Arrazola y Oswaldo Ortiz, la diputada Angela Hernandez u otros como el exprocurador Ordoñez, que encontró en este movimiento naciente, el mejor impulso para su carrera hacia la Casa de Nariño.
Pero ninguno de estos personajes ha logrado lo que la senadora "liberal" Vivianne Morales ha venido impulsando con insistencia; movilizar un referendo profundamente discriminatorio con los niños y con las familias que por su condición o por su elección, no cumplen con el estándar moral que la senadora quiere imponer.
Mientras que muchos países en Europa, Asía o incluso en algunos países de latinoamerica, como Perú, Chile, Argentina o Uruguay intentan crear políticas sociales mucho mas inclusivas, donde poblaciones excluidas históricamente o aquellas que demográficamente pueden ser consideradas como minorías, son tenidas en cuenta para la creación de políticas publicas, en Colombia vemos como, al parecer, se viene gestando una estrategia sistemática y progresiva de segregación, exclusión o eliminación social.
La diferencia pareciera el elemento a eliminar, todo lo que medianamente parezca por fuera del estándar religioso, se ve como una amenaza, como algo que necesita ser invisibilizado a costa de lo que sea, incluso si eso implica eliminar los derechos fundamentales de otros seres humanos.
Proponer un referendo en contra de la adopción de niños por parte de "familias no convencionales", según lo expresado por la senadora Morales, refiriéndose a lo que ella y otros radicales cristianos, señalan como familias que no obedecen al orden impuesto por Dios. Su esposo, el exparamilitar, exguerrillero, exsenador y ahora cristiano Carlos Alonso Lucio, refuerza esa idea repitiendo en distintas ocasiones que los niños no son mascotas y que ellos (los niños) no están para resolver los problemas psicológicos que el exsenador Lucio considera tienen, solteros y solteras de cualquier género, es decir; como si las personas solteras, viudas, gais o cualquiera que no haga parte de una familia cristiana tuviera algún defecto genético o algún problema psiquiátrico tan grave que deba ser alejado de nuestra abandonada niñez.
Es impensable que en un país donde hay, según datos del ICBF mas de 11.000 niños esperando su adopción, de los cuales hay mas de 4.000 que son de difícil adopción, por tratarse de niños y niñas mayores de 8 años o con alguna discapacidad, se proponga reducir aun mas sus posibilidades de adopción, peor aún, sin que se propongo un mecanismo alternativo de protección de esos mismos niños, es decir, no solo se les está alejando deliberadamente de su posibilidad de tener un hogar amoroso sino que ademas no se asume su protección.
Esta sería la primera vez en la historia de vida republicana en la que se votará por una iniciativa que busca eliminar los derechos de una minoría, los derechos fundamentales de muchos Colombianos, solo esperamos que nuestros "padres de la patria" cumplan su labor de padres protectores, benefactores, amorosos con todos por igual.
Es el momento de entender que en el momento en el que los argumentos legales desaparecen y surgen los argumentos religiosos, se le da fin al Estado Social de Derecho.
¡Santa discriminación!
Mié, 10/05/2017 - 10:18
En la historia de la humanidad han habido terribles experiencias donde se ha usado la santidad, el nombre de Dios (o de Alá, Krishna o cualquier otra deidad) y los distintos credos para diferentes ca