Quiero agradecer los innumerables mensajes de solidaridad y respaldo que recibí, a vuelta de correo, de mi pasado artículo de prensa “Renace la Esperanza”, indicador del deseo inconmensurable de paz que se respira en las manifestaciones y opiniones de distintas personas y sectores expresadas en varios ámbitos de la vida colombiana, lo que alienta mi certeza de que es necesario persistir en la construcción de la paz.
La sabia y prudente decisión del Presidente Santos, expresada al concluir la conmemoración del Día Nacional de la Armada en Cartagena, en los términos de suspender nuevamente los bombardeos aéreos contra campamentos de las Farc, fue recibida con alegría y esperanza por los centenares de colombianos, amantes de la paz y la solución pacífica del conflicto armado que padecemos desde el siglo pasado. Decisión tomada en el contexto de una mesa de negociación que, para lograr mayores avances en un momento determinado requiere de estímulos, o respuestas a acciones de la contraparte que permitan mantener el ritmo y/o motivación de las conversaciones, dándole cumplimiento a acuerdos anteriores de ir desescalando el conflicto, como bien lo dijo el Presidente: “ ¿Eso qué significa? Menos muertes, menos sufrimiento, menos víctimas”.
Con esta decisión soberana el Presidente Santos ha enviado un mensaje claro a los sectores guerreristas que reiteradamente reclaman el uso de la fuerza despiadada para lograr las victorias pírricas como las de la pasada administración uribista, y que realmente lo único que lograron fue aumentar la profunda división que vive la sociedad colombiana. También es un mensaje para ratificar su profunda vocación de Paz que las Farc no dudaron en calificar como “Una buena noticia para la Paz”. Debemos reconocer y exaltar estos pasos positivos que se vienen adelantando y que buscan destrabar y agilizar la mesa de negociaciones para lograr acuerdos de verdadero contenido político que vayan acercando los tiempos para arribar pronto a la firma que decreten el cese al fuego bilateral y definitivo.
Por eso es que debemos redoblar los trabajos y esfuerzos en beneficio de seguir construyendo espacios de Paz y diálogos al interior de nuestra sociedad. La consigna de estos tiempos debe ser: persistir en la búsqueda, avanzar en todo lo que permita firmar pronto en La Habana, el fin de la guerra y la violencia en la vida social y política de los colombianos. En este campo es un deber resaltar los esfuerzos de las organizaciones de la sociedad civil que junto a las Comisiones de Paz del Senado de la República y de la Cámara de Representantes llevaron a cabo el ENCUENTRO NACIONAL DE PAZ, realizado el 22 y 23 de julio de 2015, en el edificio del Congreso, el que contó con una masiva presencia de mujeres y hombres venidos desde las regiones más conflictivas de Colombia, como Cauca, Nariño, Catatumbo, en el Norte de Santander, los Llanos Orientales, entre otros.
Del poder legislativo hay que resaltar la presencia y el compromiso con la causa de la Paz de los senadores y Representantes Horacio Serpa Uribe, Iván Cepeda, Alberto Castilla, Claudia López, Antonio Navarro, Luis Fernando Velasco, Roy Barreras, Ángela Robledo, Alirio Uribe, Inti Raúl Asprilla, Clara Rojas y la exsenadora Piedad Córdoba, entre otros.
De la Sociedad Civil manifestaron su compromiso el Comité de Impulso y Acompañamiento al Consejo Nacional de Paz, el Comité Permanente por la Defensa de los DD.HH. (CPDH), Secretariado Nacional de Pastoral Social, Frente Amplio por la Paz, Clamor social por la Paz, Cumbre Agraria, Étnica, Campesina y Popular, Centro de Memoria, Paz y Reconciliación, Unión Sindical Obrera (USO), CINEP, Asamblea Permanente de la Sociedad Civil por la Paz, Marcha Patriótica, Corporación Viva la Ciudadanía, CODHES, ONIC, Fundación Nuevo Arco Iris, entre otras.
Su documento central fue titulado LA PAZ ES AHORA, hace un llamado en estos términos: “Nos convocamos a encender una llama por la Paz en los espacios y manifestaciones públicas y a promover los símbolos y cantos que expresan la voz de Colombia unida por la Paz. Llamamos a los medios de comunicación a cumplir el papel y la responsabilidad que tienen en la creación de ambientes favorables a la terminación de la confrontación, la reconciliación. Llamamos a todas las fuerzas políticas, a todos los candidatos y candidatas a optar por la Paz el próximo 25 de octubre. Nos comprometemos a promover el apoyo al actual proceso de Paz en todos los programas y acciones en respaldo a las actuales conversaciones y exploraciones, con la exigencia de parar la guerra y no hacer pausa hasta que se firmen los acuerdos definitivos de terminación del conflicto y construcción de Paz estable y duradera”.
Este es un importante ejemplo de cómo persistir en los esfuerzos para apoyar el logro de la Paz. El añorado, ansiado y esperado fin del conflicto, que sin duda, redundaran en un mejoramiento en nuestras vidas, pues no solo estaremos alejando las posibilidades de enfrentamientos armados entre los colombianos , que tanto dolor y sufrimiento han dejado en nuestras familias campesinas, indígenas, quienes ponen la mayor cuota de sangre y sacrificio en sus territorios donde se ha anidado la violencia y la muerte, sino que además los recursos físicos y los talentos humanos hoy dedicados a la guerra podrán dedicarse a construcción de una sociedad con mayor desarrollo y un nuevo y mejor tejido social.
RECOMENDADO. El excelente escritor y novelista Celso Román ha publicado su más reciente novela titulada “CARAVANA DE ALMAS”. Es un largo recorrido por la historia compleja y violenta de nuestra nación. Quiero recomendar su lectura y enviar mis sinceras felicitaciones a su comprometido autor.
Exembajador de Colombia en Europa.
Vicepresidente del Comité Permanente de Defensa de DD.HH. (CPDH).
PERSISTIR EN LOGRAR LA PAZ
Mié, 29/07/2015 - 14:05
Quiero agradecer los innumerables mensajes de solidaridad y respaldo que recibí, a vuelta de correo, de mi pasado artículo de prensa “Renace la Esperanza”, indicador del deseo inconmensurable