Zara huye de una red de prostitución que dirigen Pȃsa y Lavrenti. Busca a Aliide, la hermana de su abuela Inge. Quisiera tener una nueva identidad, reconstruirse, no ser Natasha, volverse médica y ser rica. Tiene mucho miedo. Todos tienen miedo.
La chica encontrará la casa de sus bisabuelos, sus raíces en Estonia y un pasado que ignoraba: el de su familia de nacionalistas y comunistas; el de Aliide, violada en un sótano mientras le decían: “Cada vez que te acuestes con tu marido, te acordarás de mí”; en consecuencia, hará todo lo posible para ser una mujer respetable y “que nadie supiera nada jamás”. Por eso se casó con Martin a pesar de vivir enamorada de Hans, el marido de Inge. Fantaseaba con ir a Tallin con Hans una tarde de paseo. Aliide delata a Inge. Aliide mata a Hans. Sucede entre 1930 y 1992 en Estonia, Berlín y Vladivostok.
Estonia ocupada por alemanes, que pasó de una democracia parlamentaria a un régimen casi dictatorial en 1933, conformó la zona de influencia de la Unión Soviética, fue ocupada por los nazis y considerada parte de Alemania; reconquistada por los soviéticos en 1944; con una guerrilla antisoviética en los cincuentas. Invasiones, cambios de gobierno, campos de concentración, miles de deportados y fugitivos. Estonios señalados, excluidos por las purgas. Sometidos. “Siempre había una nueva bota de cuero curtido al cromo, siempre llegaba una bota nueva, igual o diferente, pero que siempre pisaba la garganta del mismo modo…los caídos se habían descompuesto, pero ciertas cosas no cambiaban”. Aliide conocía muy bien aquella clase de hombres. “Eran de los que saben castigar a una mujer, y precisamente habían venido para eso”.
Natasha fue obligada a hacer documentales porno, a posar teniendo sexo. Tiene vergüenza de su tía que ve las fotos. Aliide comprende ese horror ya vivido. El cuerpo de las mujeres es violentado por los guerreros, por los narcotraficantes. Ambas quieren borrar el espanto. Aliide supo que ella había estado esperando a alguien. “Alguien que la ayudase o que al menos le quitase de encima parte de lo sucedido en aquel sótano. Alguien que le acariciase el pelo y le dijese que no había sido culpa suya. Que también le dijese que nunca más. Que le prometiese que nunca más, pasara lo que pasase”. Zara quería acurrucarse en el regazo de Lavrenti y dormir. Aliide asesina a Pȃsa y a su amigo.
Historia de Estonia enlazada con recuerdos de los parientes de Sofi Oknasen, finlandesa de 34 años, a quien le interesa la resistencia de Estonia con el telón de fondo de la II Guerra Mundial para reconstruir el mundo cotidiano de montones de habitantes de ese país. Por eso escribió Purga, editada en español por Publicaciones y Ediciones Salamandra, que ha ganado el Premio de Literatura del Consejo Nórdico; el Premio Femina de Literatura Extranjera; el Mika Waltari; el Runeberg; el Premio Europeo a la Mejor Novela del año 2010.
Narrativa de enorme fuerza, de crudo lenguaje con bellos títulos. Oknasen esculcó en los archivos de la KGB, en las revistas femeninas estonias de los veintes y treintas, iguales a las europeas, y cree en el poder curativo de la literatura.
Zara y Aliide, con el mismo miedo y el cuerpo ultrajado
Dom, 13/11/2011 - 00:02
Zara huye de una red de prostitución que dirigen Pȃsa y Lavrenti. Busca a Aliide, la hermana de su abuela Inge. Quisiera tener una nueva identidad, reconstruirse, no ser Natasha, volverse médica y