Ya pasaron dos meses del asesinato del director de Medicina Legal en Barranquilla, Eduardo Pinto Viloria. En este período las autoridades han encontrado ciertos detalles que juntos refuerzan la hipótesis más fuerte hasta el momento: su esposa, Dayana Jassir de la Hoz, habría sido la mente criminal del plan con el chofer de la familia, Johan Beltrán Ulloque, con quien sostenía una relación extramatrimonial.
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Los dos están en la cárcel, igual que dos de los tres sicarios de la banda conocida como ‘Los Ángeles’. Todos entregan versiones diferentes sobre cómo se fraguó el homicidio, y ahora la justicia será la encargada de juntar las piezas del rompecabezas de la historia con esas declaraciones y otros elementos que se convirtieron en pistas valiosas.
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Lo grabado en al menos siete cámaras de seguridad desmentiría lo dicho por las personas que actualmente están involucradas en el crimen.
Según Dayana Jassir, esposa de Eduardo Pinto desde hace ocho años, dos hombres que se movilizaban en un taxi la abordaron mientras ella se dirigía hacia el aeropuerto con su conductor. Supuestamente, ellos la obligaron a devolverse a su casa para hurtar dinero, pero todo acabó mal.
En imágenes captadas en la vía Cordialidad con Carrera 6, los investigadores se dan cuenta de que existen vacíos en lo contado por los presuntos autores del hecho. De acuerdo con el fiscal del caso, hasta ese punto llegó el vehículo de la mujer, y contrario a lo que dijo, no fue abordada de forma abrupta, sino que se parqueó atrás del taxi donde viajaban los tres sicarios y ellos se subieron al carro sin mayor problema.
Un empleado de una carnicería habló sobre lo que vio durante la madruga de ese 4 de mayo. “No sacaron armas, al contrario, las guardaron en las pretinas y se montaron en el carro gris sin ninguna discusión, ni amenaza, se embarcaron en la parte de atrás”.
Además describió físicamente a la mujer que viajaba en el asiento de copiloto, según lo recopila el diario El Heraldo, esas características físicas coinciden con la apariencia de Dayana Jassir: “Como mona, tenía blusa blanca, era un poco gruesa, de pelo mono y le vi bien la cara. El carro lo iba manejando un tipo moreno”.
Jesús Gutiérrez Arrieta, alias ‘Chucho’, uno de los asesinos, confesó lo sucedido. Según manifestó, él y su compañero ‘Ñeco’, quien aún se encuentra huyendo de la justicia, fueron contactados por el conductor para ejecutar el asesinato y recibir finalmente 2’900.000 pesos.
Dayana Jassir por su parte, no aceptó cargos. Su abogado señala que su único delito fue haber sido infiel, tal y como ella lo aceptó. La bacterióloga de 34 años se enfrenta a una pena de hasta 40 años de cárcel. Las cámaras, conversaciones de whatsapp y llamadas telefónicas son fundamentales para hallar la verdad en el novelesco caso.
