La Panadería Rusa, un ícono de moda local inspirada en prendas militares de Europa del Este de finales del siglo XX, anunció sorpresivamente el cierre de su local en Medellín. La noticia, publicada en sus redes sociales, ha generado conmoción y debate en la ciudad.
“Hace 5 años la guerreamos mucho para poder abrir Medellín. No fue para nada fácil pero creímos en esta bella ciudad porque su energía y empuje nos motivaban a hacerlo. Hoy a pesar de contar con un gran público decidimos decir...MEDALLO NO VA MÁS”, comienza diciendo la marca en su cuenta de Instagram.
En el comunicado, la empresa alude a dos razones principales para su decisión: la estratificación y la prostitución masiva: “lastimosamente la estratificacion y la prostitución masiva nos pegaron muy duro”.
Según el texto, el aumento del 100% en el arriendo en solo dos años, sumado a la dificultad para competir con los precios exorbitantes que pagan los extranjeros por locales comerciales en zonas "top", ha hecho insostenible el negocio.
“Nuestro arriendo se incrementó en un 100% en solo 2 años y por más que le metamos toda el alma, es muy jodido ver números positivos en esta bella ciudad en donde el extranjero vale más que el habitante local… en donde te suben descaradamente el precio de los locales comerciales para que no tengas otra opción más que irte simplemente porque para el extranjero dos mil dólares en una zona top de Medellín no son nada, pero para nosotros que la guerreamos con los insumos y la economía local es muy hp…”, explicaron.
Otra de las grandes razones que hicieron que la marca tomara esta decisión fue la estratificación socioeconómica en Medellín es un tema complejo que ha sido objeto de debate durante años.
La Panadería Rusa se encontraba ubicada en El Poblado, una de las zonas más exclusivas de Medellín. Según el comunicado, el aumento del arriendo en esta zona ha sido desmedido, haciendo que los locales comerciales sean inaccesibles para los negocios locales en parte por la gentrificación.
Asimismo, el comunicado también menciona la "prostitución masiva" como un factor que ha impactado negativamente el negocio. La Panadería Rusa se encontraba ubicada en una zona con alta incidencia de esta actividad, lo que, según la empresa, ha generado un ambiente inseguro y ha desincentivado la afluencia de clientes.
“El sector del Lleras y Provenza están siendo víctimas directas de la prostitución masiva que ahora abunda en esta zona... Hace unos años había con control aparente de sectores, pero ahora es vía libre para que este bello sector se vea sumergido en esta triste explotación y es que como es una zona bella, turística y de las mejores pues ahí es donde abunda 'el gringo' 'El buen cliente'”.
El cierre de la Panadería Rusa es un hecho lamentable que pone de relieve problemas estructurales de Medellín como la desigualdad, la gentrificación y la inseguridad. Es necesario un debate público sobre estos temas para encontrar soluciones que permitan construir una ciudad más justa y equitativa para todos sus habitantes.
Finalmente, la compañía agradeció a todos los que en este tiempo los apoyaron y les ayudaron a crecer, señalando que pese a la mala noticia habían visto esta situación como una oportunidad para mirar nuevos horizontes y abrir en otros mercados como el de Ciudad de México donde anunciaron que próximamente abrirán.
“Agradecemos enormemente a nuestros clientes que nos ayudaron a seguir adelante en esta bella ciudad, de corazón gracias. Solo nos resta decirles que tienen una ciudad hermosa, cuna de la innovación de la conciencia sana y del trabajo hecho a esfuerzo y la buena actitud echada pa'lante. Próximo desembarque CDMX”.
