Al parecer se ha subestimado la capacidad de los perros para entender palabras del lenguaje de los seres humanos, pues estos identifican diferentes idiomas, desde inglés hasta español.
Un estudio publicado el pasado 3 de agosto en Scientific Reports, afirmó que los cerebros humanos procesan los significados del léxico por separado de la prosodia del habla, en forma jerárquica. El análisis confirma que los cerebros de los perros también pueden asimilar la información por medio del acento, los tonos y la entonación de sus amos.
La investigación se llevó a cabo por la Universidad Eotvos Lorand en Hungría, donde analizaron los efectos de repetición en las palabras marcadas con elogios y palabras con una entonación neutra “identificamos adaptación temporales y anatómicamente distintos. En una región auditiva subcortical, encontramos adaptaciones de fMRI a corto y largo plazo para la prosodia emocional, pero no para la marca léxica”, afirmó Anna Gábor, Márta Gácsi, Dóra Szabó, Ádám Miklósi, Enikő Kubinyi & Attila Andics.
Ademas, la adaptación fue moderada para hacer los estudios de sesgo por edades, perros con capacidad auditiva casi primaria y otros con audición secundaria de 2 a 11 años, entre ellos seis collies fronterizos, cinco golden retrievers y un pastor alemán, registraron estimulo en la corteza auditiva de las mascotas, es decir contiene más que la prosodia emocional, término utilizado por los científicos para referirse a las emociones y sentidos al cambio del tono de la voz del humano cuando se dirige a su mascota.
¿Cómo el cerebro de los perros distingue las palabras?
“El procesamiento léxico implica el reconocimiento de la secuencia de sonido del habla y la correspondencia de tales secuencias con los significados asociados previamente. Esto requiere acceso a representaciones de secuencias de sonido de voz preexistentes, que supuestamente involucran niveles más altos de la jerarquía de procesamiento de voz. Por el contrario, el procesamiento de la prosodia emocional se basa en gran medida en señales acústicas simples (como el tono y el cambio de tono)”, afirmaron los investigadores.
Attila Andics, líder de esta investigación, comentó en una rueda de prensa, que los seres humanos comparten algunas similitudes con los caninos, aunque estos nos puedan hablar. Por lo tanto, los perros reaccionan a la entonación y el tono de la voz, asimilando el contexto de las palabras que les dicen sus amos.
