Armenia y Azerbaiyán llegaron a un acuerdo para establecer un alto el fuego en Nagorno Karabaj que debe entrar en vigor el 10 de octubre, anunció el canciller ruso, Serguéi Lavrov.
Lavrov mantuvo unas negociaciones en Moscú sobre Karabaj con su par armenio, Zograb Mnatsakanián, y homólogo azerbaiyano, Ceyhun Bayramov. Las consultas, propuestas por el presidente ruso, Vladímir Putin, duraron más de 10 horas.
"Las partes acordaron los siguientes pasos. Primero: se declara un alto el fuego a partir de las 12:00 horas de este 10 de octubre con los fines humanitarios, para realizar un canje de prisioneros de guerra y otras personas retenidas, así como un intercambio de cadáveres con la mediación del CICR (Comité Internacional de la Cruz Roja)", dijo Lavrov al término de las conversaciones.
El ministro ruso señaló que "los parámetros concretos del armisticio se acordarán adicionalmente".
"La República de Azerbaiyán, la República de Armenia, con la mediación de los copresidentes del Grupo de Minsk de la OSCE, sobre la base de los principios básicos de solución, comienzan unas negociaciones sustanciales con el fin de pronto alcanzar una resolución pacífica" del conflicto en Narogno Karabaj, agregó Lavrov.
El canciller ruso indicó que Armenia y Azerbaiyán "reiteraron su compromiso con el formato del proceso de negociaciones".
El 27 de septiembre volvieron a estallar los choques armados en Nagorno Karabaj, foco de conflicto entre Armenia y Azerbaiyán desde que ese territorio, de población mayoritariamente armenia, decidió separarse en 1988 de la entonces República Socialista Soviética de Azerbaiyán.
Ambos bandos, que se acusan de haber desatado esta espiral bélica sin precedentes desde la guerra de 1992-1994, ordenaron movilización de reservistas, impusieron la ley marcial y sostienen combates con el uso de blindados, artillería, aviación y sistemas de misiles a lo largo de la línea que separa a sus tropas.
Bakú perdió el control de Karabaj y siete distritos adyacentes tras la escalada de las hostilidades hace tres décadas.
Para impulsar una solución negociada del conflicto, la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE) instituyó en 1994 el llamado Grupo de Minsk, copresidido por EEUU, Rusia y Francia.
El grupo incluye además a Alemania, Bielorrusia, Finlandia, Italia, Suecia y Turquía, así como Armenia y Azerbaiyán, y la troika de la OSCE, los países que representan la presidencia de turno, la anterior y la siguiente.
Azerbaiyán insiste en recuperar su integridad territorial, mientras que Armenia defiende los intereses de la autoproclamada República de Nagorno Karabaj, que no es parte de las negociaciones.