El representante a la cámara Germán Navas Talero ama el automovilismo. Colecciona modelos, participa en competencias, y fue narrador deportivo de esta disciplina en el Grupo Radial Colombiano y RCN donde transmitió carreras hasta un día antes de posesionarse en el congreso. De momento es la única carta fija del Polo a la Cámara de Representantes y dice que repetirá en ese escenario porque, dice, en el senado los políticos buscan votos en Bogotá pero luego no hacen nada por la ciudad.
¿Desde qué edad empezó a correr?
Comencé ya mayorcito, por ahí a los treinta años y comencé en rallys, ya que no era tan fácil como ahora. No estaba metido en ese medio, yo era un hincha no más pero me vinculé y comencé en los rallys.
Participé en un jurgo de rallys con muy poca suerte, tengo tres copas pero nunca fui bueno. Corrí también en el autódromo, una vez casi acabo con un carro y casi acaban conmigo, después volví a correr con más continuidad cuando se inició la copa San Diego, en esta he participado casi siempre, esta copa es para veteranos.
Pero en mi época era realmente aficionado, tengo una lesión en la columna producto de un accidente que tuve en Boyacá porque iba con un muchacho Cortés que era mi navegante, yo soy fumador, entonces se nos acabaron los cigarrillos y le pregunté: ¿oiga hermano qué promedio tenemos?, dijo bajísimo, súbase un poco y podemos parar en una tienda y compramos cigarrillos, al tomar una curva el carro se me deslizó y se paró de cabeza, el copiloto se salvó porque le había hecho poner el casco, pero yo me hice un hematoma desde el cuello hasta la cintura con el cinturón.
No le hice mucho caso al médico y me puse el collar muy poco tiempo, ahora tengo falta de movilidad en el cuello.
¿A qué velocidad maneja?
Depende el tipo de competencia que sea, uno en el autódromo hace lo que el carro le dé en la recta, el mini cooper que tengo no me llega a más de 130 en la recta porque es muy corto, con un carro más potente lo que el carro le dé. He levantado mucho más, aquí no se puede, pero en Argentina he caminado a 170 km/h.
¿Y usted va tranquilo y relajado, no le da miedo?
No, yo no. Miedo no está entre mi vocabulario, obviamente soy prudente, pero miedo para nada.
¿En cuántos torneos ha participado?
Uff, no tengo ni idea. Un montón, especialmente rallys y en la mini (mini cooper) en los campeonatos que ha habido, he corrido con esa, y está perfecta, nunca la he dañado. Una vez me volqué cuando estaba calentando el motor, en cámara lenta el carro quedó de medio lado, me bajé por la ventana y lo enderecé.
¿Cuántos accidentes ha tenido?
Que me acuerde duros, el de Belén de Cerinza, otro delante de Gachancipá, donde el carro quedó muy mal, otro cerca a Quinday una noche que se atravesó una mula y nos dimos duro. Lo demás son rayones propios de una competencia.
¿Ha competido fuera del país?
No, es que yo nunca me dediqué con juicio a eso, al menos no como lo hizo Espinosa o Jorge Cortés o el papá de Juan Pablo Montoya, a veces competía con ellos y siempre me ganaban, pero yo no lo tenía como una profesión.
¿Le queda mucho por correr?
En campeonatos de este tipo de carros sí, porque yo no tengo tiempo de hacerlo en los otros, el trabajo en el congreso le quita a uno la oportunidad de hacer muchas cosas.
¿Con quién le gustaría competir?
Si volviera a nacer, correr al lado de un tipo como Sebastian Vettel, la primera vez que lo vi correr ganó una competencia en pista mojada y me impresionó ese muchacho, y siempre le he apostado a él y no me he equivocado. Siempre me ha gustado, como me gustó siempre Michael Schumacher, así todo el mundo lo odiara, yo tenía mi corazón en dos partes, en Montoya y en Schumacher, pero yo no puedo negarle a un piloto que es bueno.
Ahora el año entrante voy a tener una duda, quién va a ser mejor, Alonso o Räikkönen, porque Kimi Räikkönen se va a correr en Ferrari con Alonso, la diferencia es que Räikkönen no es un tipo que sea coequipero de nadie, él es un corredor y punto. Eso va estar bueno el año entrante.
Sorprende que una persona tan seria y con la trayectoria que ha tenido se dedique a este tipo de aventuras.
Es que la seriedad no le quita el derecho a sonreír, hay gente que dice que es inteligente el que hace mala cara. Yo considero que no, usted mira las fotos de Albert Einstein, todas son sonrientes. Yo toda la vida he sido muy abierto, en mi trabajo soy muy serio pero no he sido grosero con la gente, mi temperamento es muy extrovertido, tengo una desventaja en la política y es que digo la verdad, digo lo que siento y eso en la política es malo, sin embargo la gente cree en mí y dice: si este tipo lo dice es porque es cierto.
¿En qué le ha servido participar en carreras y sentir esa adrenalina para su vida cotidiana y su trabajo político?
A no tenerle miedo a cosas tontas, yo no le tengo miedo a las curvas, por el contrario uno goza en una curva, uno sabe en qué cambio tiene que entrar y hasta dónde puede llegar, eso es mental, pierde uno miedo a lo imprevisto.
El sueño de Germán Navas es correr contra Sebastian Vettel
Mar, 24/09/2013 - 09:46
El representante a la cámara Germán Navas Talero ama el automovilismo. Colecciona modelos, participa en competencias, y fue narrador deportivo de esta disciplina en el Grupo Radial Colombiano y RCN