Mary Luz Herrán, excompañera sentimental de Gustavo Petro con quien tiene dos hijos, rompió su silencio tras la destitución de su exesposo de la alcaldía de Bogotá, cumplida por el presidente Juan Manuel Santos el pasado miércoles.
Herrán, quien también militó en las filas del M-19 enamorada de Petro, escribe una sentida carta en la que le pide no claudicar a pesar de haber sido apartado del cargo.
“Hay que ir a las urnas y arrebatarles esa sonrisa del rostro a quienes hoy se mofan de nuestro dolor”, escribió Herrán para motivar al hombre con quien vivió durante quince años.
“Ganarles en las urnas es el único medio al que le apostamos aquel 8 de marzo de 1990 al dejar las armas”, añadió.
Esta es la carta abierta que Herrán le envía a quien fuera su anterior amor, Gustavo Petro:
CARTA ABIERTA A GUSTAVO PETRO
Ya está claro que no podemos al menos por ahora, con esta rancia oligarquía nacional.
Está claro que el haber dejado las armas y la apuesta a una vida política legal, no fueron suficientes para ser vistos con el valor agregado que la guerra y la lucha política de los alzados en armas nos daban al poder ser un instrumento de fácil acercamiento y transformación del colectivo nacional.
A ellos, esos que ostentan el poder económico y político no les sirven nuestros ideales de cambio, de dignificación de los hombres y mujeres que merecen una vida mejor.
Aislarnos del proceso político actual es darles el gusto de vernos reducidos en intenciones, en ganas y en número. Somos más, si bien no tenemos de nuestro lado el poder de la información cierta y real, el contacto directo con la población y nuestra terca convicción del querer hacer nos va a seguir fortaleciendo, éste es el momento por el cual toda esa población, todo ese pueblito que enardecido quería actuar como fuera esa noche del 19 de Marzo, debe tener nuestra respuesta, nuestro apoyo, nuestra guía.
El no presentar la terna es un error, dejar la posibilidad de continuar con el proyecto de la Bogotá Humana en manos de quienes de humanidad tienen poco, es traicionar la esperanza de esos miles y millones de ciudadanos y ciudadanas que votaron por ti y que lo volverían a hacer. No es cierto que no tengas un partido, o un movimiento, los progresistas se la han jugado y se la seguirán jugando por ti y por el país, es el momento que lo hagas tú por ellos y reasumas las banderas de esa colectividad significativa que hoy se está sintiendo huérfana.
Hay que ir a las urnas y arrebatarles esa sonrisa del rostro a quienes hoy se mofan de nuestro dolor. Ganarles en las urnas es el único medio al que le apostamos aquel 8 de marzo de 1990 al dejar las armas.
El voto tiene mucho valor, esos votos te pusieron en la Alcaldía Mayor, hoy sabemos que debemos darle el giro al valor del voto, porque como se vio el 19 de marzo, vale más el voto de los ricos que el voto de los pobres, siendo aún una abismal mayoría. No claudicar, ante nadie, no arrodillarnos, es mejor palidecer un poco que quedarnos arrodillados el resto de nuestras vidas.
No comparto el voto en blanco, ¿Qué victoria nos daría volver a convocar otras costosas elecciones?, No soy y muchos como yo, seremos Peñalosistas, siendo así, ¿Cómo vamos a derrotar a un candidato presidente que se ha mofado no solo de la CIDH, sino de nuestra historia? El Polo tardíamente se unió con el NO a la revocatoria, desde que ingresé a la izquierda, JUCO, UP, M-19, he visto como los intereses mezquinos de quienes se asumen como dirigentes no han permitido la verdadera unidad de esta izquierda que aunque agonizante en más de una ocasión se ha revelado a morir.
Esperamos la directriz de continuar luchando compañero, hoy no eres solo Petro, eres un colectivo, un país, una esperanza. Que no te derrote la terquedad, y que nuestros hijos tengan la posibilidad como todos de seguirte apoyando en esta lucha en compañía de todos los que creemos en ti y deseamos que esta historia tenga un final feliz, por el bien de todos.
Mary Luz Herrán C.
