
Luego del atentado perpetrado este sábado contra el senador Miguel Uribe Turbay, el expresidente Álvaro Uribe Vélez, líder natural del partido Centro Democrático, emitió un mensaje emotivo y enérgico en redes sociales, rechazando el ataque y pidiendo unidad nacional frente a la violencia que sigue acechando a los líderes políticos en Colombia.
“Atentaron contra una esperanza de la Patria, contra un gran esposo, padre, hijo, hermano, contra un gran compañero de trabajo.
Pedimos a Dios por la recuperación de Miguel. Nuestra confianza en los médicos, en las Fuerzas Armadas, la Justicia. Apelamos a la reflexión ciudadana”, escribió el exmandatario en su cuenta de X (antes Twitter).
Un mensaje de fe, dolor y llamado a la unidad
El pronunciamiento de Uribe llega en medio de un ambiente político tenso y conmovido. El senador Miguel Uribe Turbay, una de las figuras jóvenes con mayor proyección dentro del uribismo, fue víctima de un atentado armado en la localidad de Fontibón, en Bogotá. Afortunadamente, salió ileso del ataque, pero el hecho ha provocado una fuerte oleada de indignación en todo el país.
La reacción del expresidente no solo fue un gesto de respaldo personal hacia Miguel Uribe, sino también una manifestación pública del dolor que embarga al Centro Democrático, partido que ha denunciado en varias ocasiones amenazas y persecuciones contra sus dirigentes.
Uribe subrayó en su mensaje el carácter familiar y humano del senador: esposo, padre, hijo, hermano y compañero. Más allá del rol político, su descripción busca humanizar la figura de Miguel Uribe Turbay frente a una ciudadanía que, en ocasiones, percibe a los políticos de forma despersonalizada.
El Centro Democrático en estado de alerta
Desde el momento del atentado, varios miembros del Centro Democrático han expresado su preocupación por la seguridad de sus líderes y por el clima hostil hacia la oposición política en Colombia. Miguel Uribe ha sido una de las voces más visibles del partido en el Congreso, liderando debates clave sobre economía, seguridad y gobernabilidad.
El partido ha exigido garantías reales para ejercer la oposición y ha pedido que el ataque no quede impune. “Esto no puede convertirse en una estadística más. Necesitamos respuestas inmediatas del Estado”, manifestó otro congresista del uribismo tras conocer los hechos.
Un país que no logra superar la violencia política
Este nuevo atentado reaviva el debate sobre la seguridad de quienes participan en la vida pública en Colombia. A pesar de los esfuerzos institucionales por proteger a líderes políticos, sociales y comunitarios, los hechos demuestran que las amenazas persisten y que el país sigue enfrentando serios desafíos en materia de convivencia y respeto por la diferencia ideológica.
Desde distintos sectores, incluyendo al Gobierno Nacional y al propio presidente Gustavo Petro, se han pronunciado en rechazo al atentado, destacando la importancia de proteger la vida como el principio fundamental de cualquier democracia. Petro, en su mensaje, incluso expresó su solidaridad con las familias Uribe y Turbay, apelando al recuerdo de la violencia que ya ha marcado a esa estirpe política en el pasado.
Un llamado a la reflexión ciudadana
Uribe cierra su mensaje con un llamado a la “reflexión ciudadana”, en lo que parece ser una apelación directa al país entero. En medio de la polarización política que ha caracterizado los últimos años, el expresidente deja entrever que solo desde la unidad, la solidaridad y el respeto se puede evitar que la violencia siga cobrando protagonismo en la historia nacional.
Miguel Uribe Turbay continúa bajo observación médica, y su recuperación física parece avanzar sin complicaciones. Sin embargo, el impacto de este atentado en el debate político y en el ánimo ciudadano apenas comienza a medirse.