El presidente del Senado, Luis Fernando Velasco, se mostró preocupado en la noche de este jueves por lo que podrían estar transportando, o con qué fines se estarían usando los otros 69 carros del Congreso, de los que no se tiene información, tal como ocurrió con el que cayó en un retén del Ejército transportando más de 600 millones de pesos.
Según dijo el senador, estos carros podrían estar siendo usados para transportar drogas, armas, o peor, explosivos, pues al tener aún papeles y placas del Congreso, pueden evadir retenes y pesquisas de parte de las autoridades, por lo que podrían usarse para atentados terroristas.
Velasco, dijo en el programa Pregunta Yamid, que estos carros fueron subastados hace dos años, pero de manera extraña no han sido entregados a los nuevos dueños, y se desconoce su paradero. El congresista ya había señalado que el vehículo que fue conducido con dinero de dudosa procedencia por el hijo de la directora financiera del Senado, había rodado varias veces por Neiva.
De hecho, el parlamentario liberal aseguró que la funcionaria del Senado, quien ya fue retirada de su cargo, habría intervenido directamente en la subasta de 70 vehículos del Congreso y su posterior uso. Incluso, afirmó que otros dos excongresistas se pudieron haber lucrado con esas subastas, y ahora estos vehículos estén siendo manejados por bandas criminales.
Por esto, le pidió a la Fiscalía, Procuraduría y a la Corte Suprema de Justicia investigar a fondo estas irregularidades. Según dijo Luis Fernando Velasco, no hay ningún funcionario del Congreso que no pueda ser investigado o removido, refiriéndose a la directora financiera del Senado, quien fue recomendada en ese cargo por el exsenador Eduardo Géchem.
De otro lado, la Fiscalía está indagando al exsenador Carlos Emiro Barriga, para saber si tuvo algo que ver en la subasta irregular de más de 200 carros blindados del Congreso, en un negocio de cerca de seis mil millones de pesos.
