Se sabe que la masturbación presenta diferentes beneficios para la salud pero, ¿existe un punto en que sea negativo o dañino?
Uno de los grandes placeres en la vida es el acto sexual, sea solitario o en compañía, la energía liberada en este momento es de tal éxtasis que no hay un gran precisión sobre lo que pasa. Solo la sensación de satisfacción.
En el caso de la masturbación, se sabe que hay varios beneficios, como dormir mejor o poseer un sistema cardiovascular saludable, pero hay un punto en el que torna negativo.
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Haciendo un análisis sobre los argumentos de expertos en sexualidad humana, como tal no hay algo negativo en masturbarse.
Hacerlo diariamente está bien, el problema es cuando la autoestimulación va acompañada de malos hábitos. Para empezar, según la condición de paciente se puede presentar la adicción.
¿Cuándo saber que hay adicción a la masturbación? Cuando la idea de hacerlo le persigue todo el día y sus tareas rutinarias se ven truncadas por el deseo o necesidad urgente de darse placer.
Otros casos negativos son expuestos por el doctor Richard A. Santucci, jefe del departamento de urología del Detroit Receiving Hospital. Empieza por el caso de la masturbación enérgica, casi violenta, exponiendo un caso de un chico de 17 años, que al hacerlo, de repente, escuchó un ruido inusual, inmediatamente su erección bajó y al poco tiempo, su pene empezó a inflamarse.
Cuando llegó a urgencias su miembro parecía una berenjena, por lo que debió someterse a una cirugía de inmediato.Los riesgos de la masturbación no solo competen a hombres, en cuanto a las mujeres, existe un caso de una chica que al masturbarse con un consolador empezó a sentir un dolor agudo en la vagina y luego una incesante hemorragia. Al recurrir a emergencias y recuperarse tras varios litros de sangre, el pronóstico dictaminó que una de sus arterias ilíacas, que se encuentra debajo del abdomen, se rompió debido al trauma propiciado por el uso del objeto. [single-related post_id="839318"] Otro caso impresionante que cuenta el doctor Santucci hace referencia al meterse objetos por la uretra. Por más de que resulte curioso, un hombre debe evitar cometer este tipo de actos. Un señor australiano probó con un tenedor de diez centímetros y terminó con este objeto incrustado en su aparato reproductor. Gracias a la asistencia médica se le puedo remover pero jamás volverá a orinar como antes, puesto que es como poner un dedo sobre la boquilla de una manguera.
