Al hablar de transformación tecnológica y digital se está abordando uno de los tópicos contemporáneos más importantes en los últimos años, pues prácticamente ninguna empresa de ningún sector puede ignorar las exigencias del nuevo mundo y de las consecuencias que han ido quedando del desarrollo industrial mundial.
Hoy son cientos las empresas que buscan darles la vuelta a todas sus dinámicas productivas. Avvante se encarga de ello. Tras su cambio de de nombre -pues busca ser más cercana a su definición completa-.
“Este cambio responde a varias razones. El prefijo de Techedge anteriormente era muy diciente porque hacía alusión a que somos una empresa de tecnología, pero hoy ya todas las empresas son en mayor o menor medida tecnológicas, por lo que transformamos nuestro nombre a Avvale que en italiano significa ‘tomar ventaja, aprovechar’ y esa es nuestra apuesta seguir ayudando a las empresas a que cuenten con la tecnología y la innovación como apalancador del cambio, pero ahora enfocados en construir juntos modelos sostenibles y rentables basados en la adaptación de la economía circular. Es así como detrás de este nuevo nombre, nuestro reposicionamiento de marca evidencia lo que queremos contar al mundo: ayudar y marcar una diferencia en pro de la conciencia que nos lleve a trabajar juntos por un mundo más sostenible”, explica Fermín Álvarez, director general de Avvale en Colombia.
La explicación de los procesos de actualización en sostenibilidad y productividad se debería resumir en una sola ecuación en donde ambos aspectos se complementen de tal modo que fomenten nuevos valores corporativos.
Ponerse en contacto con consultores de Avvale, si es es representante de una empresa no es precisamente difícil. De hecho, lo que se espera al final de cualquier proceso es una sustancial liberación de espacio y optimización de todo lo que respecta a la compañía.
Todo esto no debería quedar en un segundo plano, pues según el vocero "hay un cambio de los hábitos de consumo, con lo cual las empresas deben ser muy sensibles a lo que hoy valoran las nuevas generaciones. La dinámica misma del mercado va a obligar a los empresarios a tomar nuevas decisiones, y cada vez van a estar más preparados para derribar dogmas”.