
El abogado Diego Cadena, quien fuera defensor del expresidente Álvaro Uribe, fue condenado por el delito de soborno en actuación penal debido a las gestiones que realizó para presionar a Juan Guillermo Monsalve, testigo clave en el caso por presunta manipulación de testigos contra el exmandatario.
Según la sentencia, Cadena ofreció beneficios jurídicos y apoyo económico a Monsalve con el fin de que modificara su declaración y favoreciera a Uribe, actuaciones que la Fiscalía calificó como ilegales y orientadas a alterar la verdad procesal.
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En la misma decisión, el juez absolvió a Juan José Salazar, socio de Cadena, por falta de pruebas en su contra, y también exoneró al abogado por el episodio relacionado con presuntas dádivas al exparamilitar Carlos Enrique Vélez.
A diferencia de la condena impuesta al expresidente Uribe, quien fue hallado culpable en ambos casos, Cadena podrá seguir en libertad mientras el Tribunal Superior de Bogotá resuelve la apelación.
La condena no solo impacta el proceso judicial que enfrenta el exmandatario, sino que también refuerza la narrativa de la Fiscalía sobre la existencia de una estrategia para influir en testigos clave. El hecho de que Cadena afronte la segunda instancia en libertad podría reducir la tensión mediática a corto plazo, pero mantiene vivo un capítulo judicial que seguirá pesando en el debate político y en la opinión pública, especialmente en un año preelectoral.