En medio de un clima de tensión por el aumento de violaciones al Derecho Internacional Humanitario (DIH) en varias regiones del país, el Gobierno y las disidencias del Estado Mayor de Bloques y Frente (EMBF), lideradas por alias ‘Calarcá Córdoba’, cerraron esta semana el séptimo ciclo de diálogos con un nuevo paquete de compromisos que busca reducir la violencia y preparar condiciones para las elecciones de 2026.
Un ciclo decisivo en Caquetá
Las conversaciones se llevaron a cabo entre el 17 y el 20 de noviembre en la inspección de Campo Hermoso, jurisdicción de San Vicente del Caguán (Caquetá), uno de los departamentos que —según el presidente Gustavo Petro— reportó los mayores incrementos de afectaciones al DIH durante el último año.
En esta ronda participaron Gloria Quiceno, jefa de la delegación del Gobierno, y Leopoldo Durán, coordinador de la delegación del EMBF. En la única fotografía divulgada también se observa la presencia de alias ‘Calarcá’, máximo comandante del grupo armado.
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El proceso contó además con el acompañamiento de Noruega, Irlanda, Suiza y Venezuela como países garantes, así como representantes de la ONU, la Misión de Apoyo al Proceso de Paz de la OEA (MAPP-OEA), la Conferencia Episcopal de Colombia y el Consejo Mundial de Iglesias.
1. Acuerdo especial de desescalamiento
El documento firmado contempla un acuerdo especial para el desescalamiento del conflicto, orientado a generar “hechos y gestos de paz” que reduzcan los riesgos para la población civil, los funcionarios del Estado, los firmantes de paz, la fuerza pública y los propios integrantes del EMBF.
Uno de los puntos centrales de este compromiso es la no incorporación de menores de 18 años a las filas del grupo armado. De forma paralela, el Gobierno se compromete a fortalecer programas integrales de protección para niños, niñas y adolescentes en las zonas más golpeadas por la confrontación.
2. Acceso a la tierra y Zonas de Reserva Campesina
El segundo acuerdo avanza sobre temas estructurales del campo colombiano. Las partes acordaron trabajar en materia de acceso a la tierra, la consolidación de Zonas de Reserva Campesina (ZRC), el reconocimiento de los derechos de las comunidades rurales y la conservación de territorios de interés ambiental.
3. Medio ambiente y sustitución de cultivos
Un tercer compromiso aborda la agenda ambiental. Allí se incluye la protección de la selva, la reducción de la tala de bosques, la transición hacia modelos de bioeconomía, la sustitución de cultivos de coca y la defensa de los parques nacionales naturales.
4. Garantías para las elecciones de 2026
Otro de los puntos clave del ciclo es el acuerdo para asegurar condiciones de cara a las elecciones de 2026. El texto menciona la necesidad de garantizar el libre ejercicio del derecho a elegir y ser elegido, así como permitir que todos los partidos y candidatos tengan garantías plenas para exponer sus propuestas.
5. Protección de la participación ciudadana y credibilidad del proceso
El cierre del documento incorpora dos acuerdos adicionales orientados a fortalecer la participación ciudadana en actividades promovidas por la mesa de diálogos, y a garantizar hechos verificables que refuercen la confianza pública en el proceso de paz.
